Tras el nuevo escándalo dentro de la Policía Nacional de Honduras, representantes de la sociedad civil pidieron este martes al Estado sacar las manzanas podridas de esta institución.
Carlos Hernández, representante de Transparencia Internacional, dijo que la ciudadanía debe exigir, no solo los medios de comunicación, los hondureños organizados, una investigación que arroje nombres y que le ponga rostros a todas estas denuncias que se han dado'.
'El Estado está en un gran compromiso porque al final se ha develado todo lo que entre pasillos se ha dicho por muchos años' dentro de la Policía.
Agregó: 'Si no logramos tener una respuesta concreta el Estado de derecho se estará tambaleando y estaremos en el marco de una impunidad totalmente asentada en el país'.
Depuración policial
El coordinador de la Alianza por la Paz y la Justicia (APJ), Omar Rivera, también explicó que 'la mejor forma de fortalecer la Policía Nacional es sacando a las manzanas podridas, particularmente a los altos oficiales o aquéllos que a lo largo de la última década lo han dirigido y que sus subalternos de forma consternada han visto como se dedican a actos ilícitos y son cubiertos por un manto de impunidad'.
'Todo el proceso de reforma no va a tener éxito si no se concluye la depuración policial. Nosotros estamos abocados a fortalecer esta Policía. Incentivamos al Estado a que fortalezca por la vía de investigar, judicializar y sancionar a aquellos altos oficiales que son un mal ejemplo para esta nueva generación de policías', indicó.
Explicó que más de 2,500 nuevos policías que están egresando 'se van a enfrentar a malos oficiales que continúan con malas prácticas, cometiendo actos ilícitos sin que el Estado los sancione'.
'Aquí hay cabezas que deben responder'
Hilda Caldera, viuda de Alfredo Landaverde, asesinado supuestamente por agentes de la Policía, destacó que el informe dice que estaba en la Secretaría de Seguridad y 'es increíble que el director de Policía no conozca un informe de este tipo'.
'Creo que todos los directores (de la Policía) que han pasado desde Ramírez del Cid, Escoto Salinas, José Luis Muñoz Licona, Ramón Sabillón, El Tigre Bonilla y el comisionado Villanueva deben ser interpelados porque como que se han hecho de la vista gorda', exigió Caldera.
Julieta Castellanos, rectora de la Unah, e Hilda Caldera, viuda de Alfredo Landaverde. |
La rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah), Julieta Castellanos, al referirse a la depuración policial dijo que ella siempre mostró desacuerdo o 'nuestros puntos de vista fueron muy críticos a las acciones que estaba llevando la Secretaría de Seguridad en el período de Corrales-Álvarez'.
'Lo que siempre vimos fue mucha actividad con pruebas de confianza para oficiales de escala menores y jefes policiales. Siempre demandamos que los problemas de la Policía estaban en las altas dirigencias y que de nada servía que hicieran ocho mil pruebas de confianza sino se depuraban los altos mandos, tal como ahora ha quedado demostrado', indicó.
Para la rectora de la Unah, las autoridades superiores 'se negaban apuntarle al fondo del problema mientras estaban haciendo actividades para dar a entender que algo estaban haciendo. Tomar casos marginales y no irse al fondo del problema y creo que los años han dado la razón'.
'Hay que reconocer que esta lucha contra el crimen organizado ha tenido resultados importantes, pero no hubo avance en materia de depuración policial; por lo tanto, todo lo que se está invirtiendo en formación de nuevos oficiales se va a ver truncado cuando estos se integren y en las estructuras quedan miembros de la Policía que están coludidos con el delito', destacó.