Tegucigalpa, Honduras.
Los capitalinos sufrirán fuertes racionamientos de agua potable, ya que las represas Los Laureles y Concepción tienen menos del 50% de su capacidad.
La represa Concepción tiene el 49% de almacenamiento de agua, mientras que Los Laureles cuenta con un 38% del vital líquido, según informó ayer Carlos Hernández, gerente de la división metropolitana del Sanaa.
“Entre las dos tenemos la reserva del 46% de los 46 millones que almacenamos, lo que es suficiente para aguantar un verano normal, que, de acuerdo con las predicciones, así será el verano. Nos vamos a reunir con Meteorología para que nos determine cuál será el comportamiento del fenómeno de El Niño; si se va a acabar o no, porque si se extiende a junio es otra la situación, entonces tenemos que reprogramar los horarios de servicio”.
Indicó que en enero, febrero y marzo se han estado haciendo racionamientos, pero que si en abril continúan las temperaturas altas se verán obligados a modificar los horarios de servicio de agua potable. Hernández agregó que con el agua que hay en la represa Los Laureles alcanza para abastecer a la capital hasta junio. “A mediados de septiembre tendríamos en Concepción, que es la más grande; Picacho también bajaría extremadamente y nos alcanzaría hasta agosto”.
Los capitalinos sufrirán fuertes racionamientos de agua potable, ya que las represas Los Laureles y Concepción tienen menos del 50% de su capacidad.
La represa Concepción tiene el 49% de almacenamiento de agua, mientras que Los Laureles cuenta con un 38% del vital líquido, según informó ayer Carlos Hernández, gerente de la división metropolitana del Sanaa.
“Entre las dos tenemos la reserva del 46% de los 46 millones que almacenamos, lo que es suficiente para aguantar un verano normal, que, de acuerdo con las predicciones, así será el verano. Nos vamos a reunir con Meteorología para que nos determine cuál será el comportamiento del fenómeno de El Niño; si se va a acabar o no, porque si se extiende a junio es otra la situación, entonces tenemos que reprogramar los horarios de servicio”.
Indicó que en enero, febrero y marzo se han estado haciendo racionamientos, pero que si en abril continúan las temperaturas altas se verán obligados a modificar los horarios de servicio de agua potable. Hernández agregó que con el agua que hay en la represa Los Laureles alcanza para abastecer a la capital hasta junio. “A mediados de septiembre tendríamos en Concepción, que es la más grande; Picacho también bajaría extremadamente y nos alcanzaría hasta agosto”.
