Durante la audiencia en la que se declaró culpable por fraude electrónico y el llamado Rico Act, el expresidente de Honduras Rafael Leonardo Callejas lamentó haber recibido los sobornos del llamado Fifagate.
'Sé que estuvo mal pedir y aceptar esos pagos que no eran divulgados', dijo Callejas al juez Robert Levy de la corte federal de Brooklyn.
'Yo sabía que era equivocado', dijo ante la corte el lunes, en una referencia a los sobornos recibidos por otorgar contratos de transmisión y mercadeo a una empresa basada en Miami por los partidos de Honduras en las eliminatorias mundialistas para 2014, 2018 y 2022.
Las palabras de Callejas se produjeron antes de declararse culpable el lunes ante un tribunal de Nueva York por conspiración por crimen organizado y fraude electrónico en el escándalo conocido como'Fifagate'.
'Culpable', respondió el exmandatario al ser consultado por el magistrado de una corte federal de Brooklyn en referencia a los dos cargos presentados en su contra, siendo que cada uno de ellos contempla una pena máxima de 20 años de cárcel.
Un fiscal estadounidense acusó a Callejas de recibir 1,6 millón de dólares en sobornos entre marzo de 2011 y enero de 2012 por los derechos de transmisión de los partidos de la selección hondureña.
De acuerdo con los fiscales, Callejas negoció y aceptó sobornos por centenas de miles de dólares para usar su influencia como presidente de la federación hondureña en beneficio de la empresa Media World.
Esa empresa habría entonces pagado los sobornos desde sus propias cuentas bancarias en Estados Unidos a través de un intermediario, para cuentas de Callejas en otros países.
Con esto, ya suman 14 los funcionarios que se declararon culpables y aceptaron cooperar con fiscales estadounidenses que investigan a la FIFA, en busca de una posible reducción de sus penas.
Otras 26 personas aún aguardan sus procesos.
Durante su intervención, Callejas aseguró al juez que lleva su caso que se encuentra bajo tratamiento de un cardiólogo y que debe mantener estricto cuidado de su medicación.
Además de Callejas hay otro hondureño procesado por el caso, Alfredo Hawit, suspendido presidente de la Concacaf, quien fue extraditado desde Suiza a Nueva York.
El exmandatario hondureño es uno del casi medio centenar de personas y entidades a quienes la justicia estadounidense acusa por sobornos que suman más de 200 millones de dólares, invariablemente relacionados con los derechos de comercialización y transmisión de partidos de selecciones nacionales.
El espectacular escándalo representa el más devastador golpe ya asestado a la FIFA y literalmente demolió a la cúpula del fútbol a nivel mundial.
La lista de dirigentes barridos por el escándalo incluyen al otrora todopoderoso presidente de la FIFA, Joseph Blatter, y varios vicepresidentes; al titular de la UEFA, Michel Platini, y al de la Conmebol, Juan Ángel Napout.
También resultaron arrestados ejecutivos de varias empresas que habían obtenido mediante sobornos contratos de exclusividad para transmisión de competencias.
Callejas, de 72 años y quien se encontraba en libertad bajo fianza desde que aterrizó en diciembre del año pasado en territorio estadounidense a bordo de un avión privado, escuchará la sentencia el 5 de agosto.
El dirigente fue presidente de Honduras de 1990 a 1994 y condujo la federación de fútbol de su país hasta agosto pasado, y ahora enfrenta cargos por asociación ilícita, estafa y lavado de dinero.
Como parte de su declaración de este lunes, Callejas accedió a devolver 650.000 dólares: 180.000 dólares que serán abonados en un plazo de una semana, y el resto en los próximos 12 meses.