El exdirector de la Policía hondureña, Juan Carlos 'Tigre' Bonilla, fue separado del cargo que fungía en el servicio exterior.
Bonilla estaba asignado a una misión diplomática hondureña de Colombia.
'Yo vine (Honduras) en diciembre y tuve una conversación con el ministro Julián Pacheco, donde en la fecha 12 me hizo una propuesta con la que me podía retirar de forma voluntaria y me iban a dar una bonificación', confirmó Bonilla a los periodistas en el aeropuerto Toncontín en Tegucigalpa.
'Creo que con mis derechos no puedo negociar; si llegué a un grado de un general director de la Policía Nacional donde fui nombrado por el presidente de la República Porfirio Lobo Sosa y después adscrito a la Secretaría de Seguridad por una petición personal que hice para dirigirme a Colombia por motivos de seguridad y estudio, fue lo que en ese momento se planteó y fue concedido', recordó.
Al preguntarle si es un millonario como exdirector de la Policía dijo: 'Yo solo tengo una casa, fuerza para trabajar, trabajo en compañía de mis hijos, tengo diez hijos a quienes me debo y ellos se deben a mi', señaló.
'Yo no tengo hijos mareros. Es una ofensa, antes de hacer una pregunta tiene que investigar', aclaró Bonilla con un tono molesto después que periodistas le preguntaran si tenía un hijo marero preso.
El comisionado general de la Policía dijo que está en Honduras para solicitar un permiso de estudio y terminar un doctorado en la Universidad Externado de Colombia.
Afirmó que la separación no lo tomó por sorpresa. 'Yo sé que estos cargos son de decisión de remoción del Presidente y en este caso el ministro de Seguridad', dijo.