Tegucigalpa, Honduras.
La reestructuración del Instituto Nacional Agrario (INA) aprobada desde octubre del año pasado no ha tenido ningún avance porque la Secretaría de Finanzas aún no proporciona los fondos para liquidar el personal.
La Comisión de Modernización del Estado aprobó un plan de restructuración de las autoridades del INA, con lo cual quedaría solo con 500 empleados de los 982 que tiene.
Esto significa el despido de unos 482 trabajadores, de los que alrededor de 240 están dispuestos a abandonar la institución si les pagan sus derechos laborales, lo que para el INA implica una erogación de unos 500 millones de lempiras.
Ramón Bulnes, presidente del Sindicato de Trabajadores del INA, afirmó que “el problema que tiene ese proceso de reestructuración es el dinero, porque no lo hay”.
Calculó que 53 trabajadores están en la edad de jubilación y aún siguen en la entidad; el impedimento es que no les prometen el pago de las prestaciones. “El ministro de Finanzas miente. Quiere despedir a los trabajadores y después de un año pagar las prestaciones y no podemos permitir eso”, indicó.
Sin sueldo
El sindicalista denunció que este año aún les adeudan el salario de enero.
Reprochó la acción porque está iniciando el año y se “supone” que el presupuesto está en su mayoría. También, la institución les debe unos tres años por concepto de vacaciones.
La planilla mensual del INA alcanza los 19 millones de lempiras. En cambio, la deuda por vacaciones implica un aproximado de L130 millones.
La demora en el pago de salarios viene desde años anteriores y esto también tiene su causa en que la entidad opera en números rojos y se mantiene de algunos servicios y cooperación externa.
La reestructuración del Instituto Nacional Agrario (INA) aprobada desde octubre del año pasado no ha tenido ningún avance porque la Secretaría de Finanzas aún no proporciona los fondos para liquidar el personal.
La Comisión de Modernización del Estado aprobó un plan de restructuración de las autoridades del INA, con lo cual quedaría solo con 500 empleados de los 982 que tiene.
Esto significa el despido de unos 482 trabajadores, de los que alrededor de 240 están dispuestos a abandonar la institución si les pagan sus derechos laborales, lo que para el INA implica una erogación de unos 500 millones de lempiras.
Ramón Bulnes, presidente del Sindicato de Trabajadores del INA, afirmó que “el problema que tiene ese proceso de reestructuración es el dinero, porque no lo hay”.
Calculó que 53 trabajadores están en la edad de jubilación y aún siguen en la entidad; el impedimento es que no les prometen el pago de las prestaciones. “El ministro de Finanzas miente. Quiere despedir a los trabajadores y después de un año pagar las prestaciones y no podemos permitir eso”, indicó.
Sin sueldo
El sindicalista denunció que este año aún les adeudan el salario de enero.
Reprochó la acción porque está iniciando el año y se “supone” que el presupuesto está en su mayoría. También, la institución les debe unos tres años por concepto de vacaciones.
La planilla mensual del INA alcanza los 19 millones de lempiras. En cambio, la deuda por vacaciones implica un aproximado de L130 millones.
La demora en el pago de salarios viene desde años anteriores y esto también tiene su causa en que la entidad opera en números rojos y se mantiene de algunos servicios y cooperación externa.