Tegucigalpa, Honduras.
La caída en el precio del búnker y la estabilidad del tipo de cambio permiten que por segundo mes consecutivo el ajuste por combustible que se aplica a la tarifa de energía eléctrica quede en 0%, confirmaron las autoridades de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee).
El ajuste desaparece porque cuando el cálculo es igual o inferior al 5% la ley no permite que la estatal lo traslade al consumidor. Los abonados de la Enee no pagarán por este componente mientras el comportamiento se mantenga, lo que dejará un alivio en sus bolsillos. No obstante, sí continúan asumiendo el costo de los otros dos componentes de la tarifa: la energía consumida y el alumbrado público.
Para aquellos clientes que mantienen su consumo mensual o lo aumentan, el impacto es mayor, explicaron expertos.
De enero a diciembre de 2015, el precio del búnker bajó de 40.10 a 26.24 dólares por barril, equivalente a 13.86 dólares menos.
En el pliego tarifario de la Enee, vigente desde febrero de 2009, se fijó el precio del barril de combustible en 55 dólares. Al bajar de ese valor debía desaparecer, sin embargo, fue reformado y se le agregó el tipo de cambio, lo que hacía difícil eliminarlo.
Sobre una variación en la tarifa por kilovatio consumido, las autoridades de la estatal aseguran que eso corresponde a la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (Cree), que sustituyó a la Comisión Nacional de Energía (CNE). Entre los compromisos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) se acordó que la tarifa debía aumentarse.
Gerardo Salgado, presidente del Cree, expresó que no se ha definido ningún cambio, pero afirmó que pronto habrá un nuevo reglamento de tarifas.
La caída en el precio del búnker y la estabilidad del tipo de cambio permiten que por segundo mes consecutivo el ajuste por combustible que se aplica a la tarifa de energía eléctrica quede en 0%, confirmaron las autoridades de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee).
El ajuste desaparece porque cuando el cálculo es igual o inferior al 5% la ley no permite que la estatal lo traslade al consumidor. Los abonados de la Enee no pagarán por este componente mientras el comportamiento se mantenga, lo que dejará un alivio en sus bolsillos. No obstante, sí continúan asumiendo el costo de los otros dos componentes de la tarifa: la energía consumida y el alumbrado público.
Para aquellos clientes que mantienen su consumo mensual o lo aumentan, el impacto es mayor, explicaron expertos.
De enero a diciembre de 2015, el precio del búnker bajó de 40.10 a 26.24 dólares por barril, equivalente a 13.86 dólares menos.
En el pliego tarifario de la Enee, vigente desde febrero de 2009, se fijó el precio del barril de combustible en 55 dólares. Al bajar de ese valor debía desaparecer, sin embargo, fue reformado y se le agregó el tipo de cambio, lo que hacía difícil eliminarlo.
Sobre una variación en la tarifa por kilovatio consumido, las autoridades de la estatal aseguran que eso corresponde a la Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (Cree), que sustituyó a la Comisión Nacional de Energía (CNE). Entre los compromisos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) se acordó que la tarifa debía aumentarse.
Gerardo Salgado, presidente del Cree, expresó que no se ha definido ningún cambio, pero afirmó que pronto habrá un nuevo reglamento de tarifas.