San Pedro Sula, Honduras.
La salud de 9,000 cocodrilos de la Fundación Biológica Jaime Rosenthal, que tienen más de 40 días sin comer, alertó a las autoridades del Instituto de Conservación Forestal (ICF) y a miembros de la Fundación Nacional Protectora de Animales (Funapa).
El problema de la cocodrilera Rosenthal, ubicada en Villanueva, Cortés, fue revelado ayer por un reportaje de Diario LA PRENSA, tras el cual hubo más de 2,000 comentarios en las redes sociales por parte de hondureños pidiendo que se dé una alternativa para salvar a los animales y se busque una solución para los empleados que trabajan en el lugar.
Además de la falta de fondos para llevar alimento a los reptiles, en la cocodrilera ya no se está dando mantenimiento, pues varios empleados buscaron otras fuentes de ingreso para llevar sustento a sus hogares, pues temen quedar sin pago y sin trabajo.
Solo un milagro
Guillermo Van Tuyll, director de Funapa, considera que la situación de los cocodrilos es crítica. “Temo que esos cocodrilos van a morir, porque no creo que el Estado de Honduras tenga la capacidad de hacerse cargo de ellos. Esto es muy complejo, porque no son gallinas ni perros los que quedaron ahí, son 9,000 cocodrilos los que hay que alimentar y eso es muy complicado”, expresó Van Tuyll.
El director de Funapa dijo que “no hay un lugar para soltar a estos cocodrilos, son demasiados, causarían un desastre. Es un problema monstruoso el que ha quedado. Los cocodrilos están a la merced de los humanos”, dijo el especialista.
La cocodrilera no está intervenida por las autoridades de Honduras ni fue señalada por la Ofac del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que el pasado 7 de octubre señaló como l avadores de activos del narcotráfico a Jaime, Yani y Yankel Rosenthal y a las principales empresas de Inversiones Continental.
El bloqueo de la Ofac a las principales empresas de los Rosenthal dejó a la cocodrilera sin ingresos, pues como admitió el propio Jaime Rosenthal en 2014, la fundación funcionaba con pérdidas porque era un proyecto para futuro.
La salud de 9,000 cocodrilos de la Fundación Biológica Jaime Rosenthal, que tienen más de 40 días sin comer, alertó a las autoridades del Instituto de Conservación Forestal (ICF) y a miembros de la Fundación Nacional Protectora de Animales (Funapa).
El problema de la cocodrilera Rosenthal, ubicada en Villanueva, Cortés, fue revelado ayer por un reportaje de Diario LA PRENSA, tras el cual hubo más de 2,000 comentarios en las redes sociales por parte de hondureños pidiendo que se dé una alternativa para salvar a los animales y se busque una solución para los empleados que trabajan en el lugar.
Además de la falta de fondos para llevar alimento a los reptiles, en la cocodrilera ya no se está dando mantenimiento, pues varios empleados buscaron otras fuentes de ingreso para llevar sustento a sus hogares, pues temen quedar sin pago y sin trabajo.
FOTOS: El criadero de cocodrilos de los Rosenthal
Pablo Dubón, director regional del ICF, reveló que irán hoy a supervisar la situación en la fundación. “Ya habíamos ido una vez a ver cómo estaban los animales y lo haremos de nuevo, porque nos preocupa su salud. Creemos que hay que actuar lo antes posible para evitar que la situación empeore”.
Dubón expresó que había hecho peticiones para que se interviniera la cocodrilera y así poder tomar decisiones sobre los animales. “Se podría trasladar a los cocodrilos a otra parte o buscar lo mejor para ellos, pues están en amenaza por su actual situación”, dijo el director de ICF.
| Sus lagunas o áreas están sucias y los empleados no tienen cómo darles los cuidados que normalmente les brindaban a los animales.
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Guillermo Van Tuyll, director de Funapa, considera que la situación de los cocodrilos es crítica. “Temo que esos cocodrilos van a morir, porque no creo que el Estado de Honduras tenga la capacidad de hacerse cargo de ellos. Esto es muy complejo, porque no son gallinas ni perros los que quedaron ahí, son 9,000 cocodrilos los que hay que alimentar y eso es muy complicado”, expresó Van Tuyll.
El director de Funapa dijo que “no hay un lugar para soltar a estos cocodrilos, son demasiados, causarían un desastre. Es un problema monstruoso el que ha quedado. Los cocodrilos están a la merced de los humanos”, dijo el especialista.
La cocodrilera no está intervenida por las autoridades de Honduras ni fue señalada por la Ofac del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, que el pasado 7 de octubre señaló como l avadores de activos del narcotráfico a Jaime, Yani y Yankel Rosenthal y a las principales empresas de Inversiones Continental.
El bloqueo de la Ofac a las principales empresas de los Rosenthal dejó a la cocodrilera sin ingresos, pues como admitió el propio Jaime Rosenthal en 2014, la fundación funcionaba con pérdidas porque era un proyecto para futuro.
