San Pedro Sula, Honduras.
Expertos señalan que el creciente parque vehicular de la ciudad deja en evidencia la falta de obras y la incapacidad de la infraestructura para soportarlo.
Según el Registro Vehicular del Instituto de la Propiedad (IP), en San Pedro Sula hay 205,604 vehículos inscritos hasta la fecha. En lo que va de este año se han registrado 6,881 nuevos automotores.
Un documento específica que en el año 2013 el número de unidades ascendía a 189,592 carros, lo que significa un incremento de 9,721.
En 2014 la cantidad aumentó a 198,723, teniendo ese año la inscripción de 9,131 nuevos automotores. Es decir, que en los últimos tres años el crecimiento vehicular ha sido de un 8%.
A la cifra anterior se suma un parque flotante de 238,500 carros que entran diariamente por los tres bulevares.
La Dirección de Tránsito indica que en tres años ha habido un aumento del 16% en la cantidad de vehículos que ingresan a diario a la ciudad. En total, por las calles de la capital industrial circulan a diario 444,104 vehículos.
Compras y migración laboral
Reyna Martel, jefa de Registro Vehicular del IP, explica que hay muchos vehículos que han dejado de circular porque ya cumplieron su vida útil. Otros han sido reportados como robados o han salido de la ciudad.
Todos los conductores están obligados a hacer audiencias de descargo, presentarse a las oficinas ubicadas en la Plaza Los Castaños en el bulevar del norte. Martel dice que hay vehículos que deben ser eliminados del sistema porque ya no están en uso.
Osman Díaz, director nacional de Tránsito, informa que el crecimiento del parque vehicular en general se debe a que cada vez más personas compran un vehículo nuevo o usado, y a que cada vez residentes de otros municipios se desplazan a trabajar a la capital industrial.
“El parque vehicular ha crecido y no han hecho más obras viales en la ciudad. Se necesitan más”, dice Díaz, quien enfatiza también en que han proliferado los puntos críticos de San Pedro Sula y que ya no hay horas específicas de embotellamientos, porque durante todo el día se hace caos en el tráfico.
En la capital industrial hay asignados 100 elementos de Tránsito. Es decir, hay un policía vial para 4,440 conductores.
Los bulevares más caóticos son el norte y este, caso contrario al bulevar del sur, donde las vías están terminadas y no se ve tanto bache.
“Mucho permiso”
Osmín Bautista, exalcalde de San Pedro Sula y vicepresidente regional de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), menciona que la misma infraestructura de hace más de 30 años soporta más del triple de vehículos desplazándose por las parchadas arterias.
“Por eso vemos los grandes congestionamientos. Necesitamos vías alternas, porque San Pedro se ha quedado sin vías alternas”.
Bautista critica la permisividad que ha habido de las autoridades con el cierre de calles y avenidas con trancas y portones por parte de los pobladores.
“Son más de 80 intersecciones conflictivas que tiene la ciudad que se pueden solucionar con pasos a desnivel para que en diez años tengamos una infraestructura decente”, expresa.
El empresario señala que los bulevares están sobrecargados por la falta de alivios, calles inconclusas o sin pavimentar. Rubén Lozano, presidente de la Fundación para el Desarrollo del Valle de Sula, recuerda que en el foro vial realizado hace dos años se dio a conocer la necesidad de las 46 obras más urgentes en movilidad vial. Con inversión público-privada se llevarán a cabo 24 de ellas; sin embargo, opina que la alcaldía ha estado “dormida” para comenzar los otros proyectos que se necesitan.
En la lista figuran pavimentaciones de calles inconclusas, intercambiadores, puentes y ampliaciones.
Lozano agrega, que si no se realizan las soluciones en un máximo de tres años, al pasar más tiempo no se tendrá el impacto positivo que se quiere en el desarrollo vial.
Considera que hay que preocuparse por el libramiento de San Pedro Sula, del Canal Seco, porque eso va a “evidenciar más el déficit que tenemos y toda esa carga pesada nos terminará de destruir las calles”.
Expertos señalan que el creciente parque vehicular de la ciudad deja en evidencia la falta de obras y la incapacidad de la infraestructura para soportarlo.
Según el Registro Vehicular del Instituto de la Propiedad (IP), en San Pedro Sula hay 205,604 vehículos inscritos hasta la fecha. En lo que va de este año se han registrado 6,881 nuevos automotores.
Un documento específica que en el año 2013 el número de unidades ascendía a 189,592 carros, lo que significa un incremento de 9,721.
En 2014 la cantidad aumentó a 198,723, teniendo ese año la inscripción de 9,131 nuevos automotores. Es decir, que en los últimos tres años el crecimiento vehicular ha sido de un 8%.
A la cifra anterior se suma un parque flotante de 238,500 carros que entran diariamente por los tres bulevares.
La Dirección de Tránsito indica que en tres años ha habido un aumento del 16% en la cantidad de vehículos que ingresan a diario a la ciudad. En total, por las calles de la capital industrial circulan a diario 444,104 vehículos.
Compras y migración laboral
Reyna Martel, jefa de Registro Vehicular del IP, explica que hay muchos vehículos que han dejado de circular porque ya cumplieron su vida útil. Otros han sido reportados como robados o han salido de la ciudad.
Todos los conductores están obligados a hacer audiencias de descargo, presentarse a las oficinas ubicadas en la Plaza Los Castaños en el bulevar del norte. Martel dice que hay vehículos que deben ser eliminados del sistema porque ya no están en uso.
Osman Díaz, director nacional de Tránsito, informa que el crecimiento del parque vehicular en general se debe a que cada vez más personas compran un vehículo nuevo o usado, y a que cada vez residentes de otros municipios se desplazan a trabajar a la capital industrial.
“El parque vehicular ha crecido y no han hecho más obras viales en la ciudad. Se necesitan más”, dice Díaz, quien enfatiza también en que han proliferado los puntos críticos de San Pedro Sula y que ya no hay horas específicas de embotellamientos, porque durante todo el día se hace caos en el tráfico.
En la capital industrial hay asignados 100 elementos de Tránsito. Es decir, hay un policía vial para 4,440 conductores.
Los bulevares más caóticos son el norte y este, caso contrario al bulevar del sur, donde las vías están terminadas y no se ve tanto bache.
“Mucho permiso”
Osmín Bautista, exalcalde de San Pedro Sula y vicepresidente regional de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), menciona que la misma infraestructura de hace más de 30 años soporta más del triple de vehículos desplazándose por las parchadas arterias.
“Por eso vemos los grandes congestionamientos. Necesitamos vías alternas, porque San Pedro se ha quedado sin vías alternas”.
Bautista critica la permisividad que ha habido de las autoridades con el cierre de calles y avenidas con trancas y portones por parte de los pobladores.
“Son más de 80 intersecciones conflictivas que tiene la ciudad que se pueden solucionar con pasos a desnivel para que en diez años tengamos una infraestructura decente”, expresa.
El empresario señala que los bulevares están sobrecargados por la falta de alivios, calles inconclusas o sin pavimentar. Rubén Lozano, presidente de la Fundación para el Desarrollo del Valle de Sula, recuerda que en el foro vial realizado hace dos años se dio a conocer la necesidad de las 46 obras más urgentes en movilidad vial. Con inversión público-privada se llevarán a cabo 24 de ellas; sin embargo, opina que la alcaldía ha estado “dormida” para comenzar los otros proyectos que se necesitan.
En la lista figuran pavimentaciones de calles inconclusas, intercambiadores, puentes y ampliaciones.
Lozano agrega, que si no se realizan las soluciones en un máximo de tres años, al pasar más tiempo no se tendrá el impacto positivo que se quiere en el desarrollo vial.
Considera que hay que preocuparse por el libramiento de San Pedro Sula, del Canal Seco, porque eso va a “evidenciar más el déficit que tenemos y toda esa carga pesada nos terminará de destruir las calles”.