Tegucigalpa, Honduras.
Ante el desplome del precio de los combustibles a nivel internacional, los valores de la energía térmica continuaron este mes de septiembre hacia la baja, por lo que se espera que en los próximos meses esa tendencia se refleje en la tarifa de electricidad de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee.)
En este momento las plantas térmicas están ofreciendo un valor promedio de seis centavos de dólar el kilovatio hora.
Esta rebaja convierte a la producción térmica en la más barata del mercado nacional y regional, lo que repercute positivamente en las finanzas de la Enee, en vista que a ese precio se produce alrededor del 44% de los requerimientos de electricidad del país. De acuerdo a datos proporcionados por ese sector, en Honduras el 75% de la generación de energía térmica privada tiene su precio variable durante el mes de septiembre a seis centavos de dólar el kilovatio hora, siendo el más bajo a nivel de Centroamérica para la producción con la misma tecnología.
Mientras tanto, el 25% restante de la generación térmica tiene un precio entre ocho y diez centavos de dólar por kilovatio hora. De los 894 megavatios de capacidad instalada por los generadores privados, 410 megavatios de esa producción tiene un precio variable de seis centavos de dólar y en esas plantas se produce el 75% de la energía térmica privada que compra la Enee. De acuerdo a los datos proporcionados por la Enee, en este momento el 62.2% de la energía térmica está a seis centavos de dólar, el 16.8% está a siete centavos de dólar y el restante 20% está a ocho centavos de dólar por kilovatio hora.
En ese sentido, los expertos consideran que todas las fuentes de generación de energía son necesarias, para el caso la energía térmica tiene mayor disponibilidad y beneficia cuando los precios de los combustibles bajan, como ha sucedido en los últimos meses. Además, garantiza y asegura el suministro cuando se necesita en el caso de que no haya suficiente agua y sol, como ha ocurrido en los últimos meses como resultado de la aguda sequía que afecta el país.
Desplome
Según el monitoreo de la Secretaría de Desarrollo Económico, los precios de los combustibles desde finales del año 2014 han mostrado una tendencia hacia la baja y eso ha repercutido directamente una disminución del cobro que las empresas generadoras de energía térmica hacen a la Enee, reduciendo la factura energética producida con búnker y diésel.
En abril del año pasado, cuando el petróleo estaba a 100 dólares el barril, los precios de producción oscilaron entre los 14 centavos de dólar el kilovatio hora, y actualmente el valor de esa generación térmica oscila entre 6 y 8 centavos de dólar el kilovatio hora.
Bajo ese contexto, miembros del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Stenee) consultados por LA PRENSA indicaron que se espera que esa rebaja en el costo de producción térmica se refleje en las tarifas de electricidad que se aplican a la población.
Lamentaron que muchas veces lo que sube no baja en Honduras, pero esperan que el Gobierno se apiade de la población y reduzca las altas tarifas que se aplican al sector residencial y comercial.
Ante el desplome del precio de los combustibles a nivel internacional, los valores de la energía térmica continuaron este mes de septiembre hacia la baja, por lo que se espera que en los próximos meses esa tendencia se refleje en la tarifa de electricidad de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee.)
En este momento las plantas térmicas están ofreciendo un valor promedio de seis centavos de dólar el kilovatio hora.
Esta rebaja convierte a la producción térmica en la más barata del mercado nacional y regional, lo que repercute positivamente en las finanzas de la Enee, en vista que a ese precio se produce alrededor del 44% de los requerimientos de electricidad del país. De acuerdo a datos proporcionados por ese sector, en Honduras el 75% de la generación de energía térmica privada tiene su precio variable durante el mes de septiembre a seis centavos de dólar el kilovatio hora, siendo el más bajo a nivel de Centroamérica para la producción con la misma tecnología.
Mientras tanto, el 25% restante de la generación térmica tiene un precio entre ocho y diez centavos de dólar por kilovatio hora. De los 894 megavatios de capacidad instalada por los generadores privados, 410 megavatios de esa producción tiene un precio variable de seis centavos de dólar y en esas plantas se produce el 75% de la energía térmica privada que compra la Enee. De acuerdo a los datos proporcionados por la Enee, en este momento el 62.2% de la energía térmica está a seis centavos de dólar, el 16.8% está a siete centavos de dólar y el restante 20% está a ocho centavos de dólar por kilovatio hora.
En ese sentido, los expertos consideran que todas las fuentes de generación de energía son necesarias, para el caso la energía térmica tiene mayor disponibilidad y beneficia cuando los precios de los combustibles bajan, como ha sucedido en los últimos meses. Además, garantiza y asegura el suministro cuando se necesita en el caso de que no haya suficiente agua y sol, como ha ocurrido en los últimos meses como resultado de la aguda sequía que afecta el país.
Desplome
Según el monitoreo de la Secretaría de Desarrollo Económico, los precios de los combustibles desde finales del año 2014 han mostrado una tendencia hacia la baja y eso ha repercutido directamente una disminución del cobro que las empresas generadoras de energía térmica hacen a la Enee, reduciendo la factura energética producida con búnker y diésel.
En abril del año pasado, cuando el petróleo estaba a 100 dólares el barril, los precios de producción oscilaron entre los 14 centavos de dólar el kilovatio hora, y actualmente el valor de esa generación térmica oscila entre 6 y 8 centavos de dólar el kilovatio hora.
Bajo ese contexto, miembros del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Stenee) consultados por LA PRENSA indicaron que se espera que esa rebaja en el costo de producción térmica se refleje en las tarifas de electricidad que se aplican a la población.
Lamentaron que muchas veces lo que sube no baja en Honduras, pero esperan que el Gobierno se apiade de la población y reduzca las altas tarifas que se aplican al sector residencial y comercial.
