Un total de 1,559 estudiantes hondureños se graduaron hoy de un programa, auspiciado por Estados Unidos, que busca prevenir la violencia y evitar que los menoresse incorporen a pandillas callejeras conocidas como maras.
El Programa de Educación y Entrenamiento en Resistencia a las Pandillas (GREAT, por sus siglas en inglés) fue aprobado por 1,559 jóvenes hondureños y este viernes recibieron su diploma en una ceremonia en Tegucigalpa a la que asistieron diplomáticos estadounidenses, instructores, policías y maestros.
El objetivo del programa es 'prevenir la participación de jóvenes en las pandillas' a través de la enseñanza de habilidades para producir cambios de actitud y comportamiento, dijo a periodistas Glenda Corrales, una instructora de la Policía hondureña.
La iniciativa busca también prevenir el delito y la violencia, así como desarrollar una 'relación positiva' entre la Policía, las familias y los jóvenes para tener 'comunidades más seguras', añadió Corrales.
El programa es auspiciado por la sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley de la embajada de Estados Unidos en Honduras y por más de 70 instructores de la Policía hondureña, según un comunicado de la legación estadounidense en Tegucigalpa.
La iniciativa se replica en La Ceiba y Puerto Cortés, ambos en el Caribe hondureño, San Pedro Sula (norte), La Esperanza (occidente), Comayagua (centro), la capital hondureña y en el departamento oriental de Danlí, de acuerdo a la información oficial.
Desde su inicio en 2013, el programa ha preparado a más de 40.000 niños y jóvenes hondureños gracias al apoyo logístico, material educativo y vehículos proporcionados por el Gobierno estadounidense.
La ola de violencia en Honduras, que las autoridades atribuyen a las pandillas y grupos del narcotráfico, deja un promedio de 14 homicidios diarios. EFE