Ciudad de Panamá, Panamá
Honduras, Panamá y Guatemala se enfrentan a un prolongado período seco vinculado al fenómeno El Niño que ha afectado la producción de alimentos, especialmente la llamada agricultura de subsistencia, de la que dependen miles de familias pobres.
Honduras parece ser el país más perjudicado por la sequía, que según fuentes oficiales aqueja a unas 80,000 familias pobres de 13 de los 18 departamentos del país, cuyo sector productor pide sea decretada un estado de emergencia.
La situación ha puesto en alerta a los gobiernos de la región, que han comenzado a distribuir recursos extraordinarios y semillas a los campesinos, mientras que organismos mundiales han pedido afianzar los esfuerzos locales y la cooperación internacional para atender a las poblaciones más vulnerables.
El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, dijo el viernes que se prevé un déficit de alimentos en cerca de 146 municipios del país.
En algunos lugares de Honduras la sequía ha afectado el 100 % de los cultivos de subsistencia de granos básicos como maíz y fríjoles, mientras que en otras las pérdidas oscilan entre el 60 % y 80 %.
En las zonas urbanas de Honduras la falta de lluvias se hace sentir con drásticos racionamientos de agua potable y energía eléctrica.
El Gobierno de Panamá ya decretó, el pasado día 11, un estado de emergencia para enfrentar el impacto de El Niño en el 2015 y 2016, que incluye medidas como la prohibición de regar jardines y áreas públicas con agua, cuya merma incluso amenaza con repercutir en el tránsito de buques por el Canal interoceánico.
La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) anunció el viernes que suspendió 'hasta nuevo aviso' una medida de restricción del paso de buques de gran calado, que regiría desde el próximo 8 de septiembre, debido a que las lluvias caídas en los últimos días han mejorado los niveles de agua de la cuenca que lo alimenta.
La sequía en Panamá ha mermado en especial la producción agropecuaria en las zonas centrales del país.
En Guatemala las autoridades de socorro han señalado que la persistencia del déficit de lluvias probablemente obligará a decretar en el corto plazo una emergencia por la sequía, que afecta a 296.817 familias, según cifras oficiales.
Unos 9 departamentos de Guatemala reciben alimentos que distribuye el Gobierno para paliar la falta de alimentos.
En El Salvador, las autoridades han alertado a los ciudadanos para que no malgasten el agua, y los agricultores ha sido beneficiados con paquetes de semillas para siembra postrera.
En Nicaragua, la falta de lluvia golpea a sectores agrícolas y ganaderos en los municipios de la franja del Pacífico, y los productores han pedido al Gobierno evaluar los daños.
El presidente del Banco Central de Nicaragua, Ovidio Reyes, dijo sin embargo el jueves que de momento no es necesario declarar una emergencia por la sequía.
Costa Rica levantó en marzo pasado una alerta amarilla decretada en julio del 2014 al registrarse entonces un déficit de lluvias de hasta un 65 % en algunas zonas de la costa del Pacífico.
El coordinador de la Oficina Subregional de la FAO para Mesoamérica, Ignacio Rivera, dijo esta semana en Panamá que la sequía ha sido 'muy severa en este ciclo', en especial en el Corredor Seco que abarca las costas pacíficas de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá.
'Se espera un ciclo de poca agua hasta principios del 2016. Ha empezado a llover en fechas recientes, pero lo que traemos es un déficit en las regiones agrícolas', declaró Rivera a Efe.
El director internacional del Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño (CIIFEN), Rodney Martínez, dijo esta semana a Efe que El Niño está 'fuerte en el Pacífico', y que la discusión científica ahora se centra en asuntos como qué intensidad llegará a tener y hasta cuándo se va a extender.
Se presume 'que el máximo de este Niño se alcance entre noviembre de este año y enero de 2016, sin que signifique esto que durante estos meses no esté afectando', añadió el representante del CIIFEN, con sede en Guayaquil, suroeste de Ecuador. EFE
Honduras, Panamá y Guatemala se enfrentan a un prolongado período seco vinculado al fenómeno El Niño que ha afectado la producción de alimentos, especialmente la llamada agricultura de subsistencia, de la que dependen miles de familias pobres.
Honduras parece ser el país más perjudicado por la sequía, que según fuentes oficiales aqueja a unas 80,000 familias pobres de 13 de los 18 departamentos del país, cuyo sector productor pide sea decretada un estado de emergencia.
La situación ha puesto en alerta a los gobiernos de la región, que han comenzado a distribuir recursos extraordinarios y semillas a los campesinos, mientras que organismos mundiales han pedido afianzar los esfuerzos locales y la cooperación internacional para atender a las poblaciones más vulnerables.
El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, dijo el viernes que se prevé un déficit de alimentos en cerca de 146 municipios del país.
En algunos lugares de Honduras la sequía ha afectado el 100 % de los cultivos de subsistencia de granos básicos como maíz y fríjoles, mientras que en otras las pérdidas oscilan entre el 60 % y 80 %.
En las zonas urbanas de Honduras la falta de lluvias se hace sentir con drásticos racionamientos de agua potable y energía eléctrica.
El Gobierno de Panamá ya decretó, el pasado día 11, un estado de emergencia para enfrentar el impacto de El Niño en el 2015 y 2016, que incluye medidas como la prohibición de regar jardines y áreas públicas con agua, cuya merma incluso amenaza con repercutir en el tránsito de buques por el Canal interoceánico.
La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) anunció el viernes que suspendió 'hasta nuevo aviso' una medida de restricción del paso de buques de gran calado, que regiría desde el próximo 8 de septiembre, debido a que las lluvias caídas en los últimos días han mejorado los niveles de agua de la cuenca que lo alimenta.
La sequía en Panamá ha mermado en especial la producción agropecuaria en las zonas centrales del país.
En Guatemala las autoridades de socorro han señalado que la persistencia del déficit de lluvias probablemente obligará a decretar en el corto plazo una emergencia por la sequía, que afecta a 296.817 familias, según cifras oficiales.
Unos 9 departamentos de Guatemala reciben alimentos que distribuye el Gobierno para paliar la falta de alimentos.
En El Salvador, las autoridades han alertado a los ciudadanos para que no malgasten el agua, y los agricultores ha sido beneficiados con paquetes de semillas para siembra postrera.
En Nicaragua, la falta de lluvia golpea a sectores agrícolas y ganaderos en los municipios de la franja del Pacífico, y los productores han pedido al Gobierno evaluar los daños.
El presidente del Banco Central de Nicaragua, Ovidio Reyes, dijo sin embargo el jueves que de momento no es necesario declarar una emergencia por la sequía.
Costa Rica levantó en marzo pasado una alerta amarilla decretada en julio del 2014 al registrarse entonces un déficit de lluvias de hasta un 65 % en algunas zonas de la costa del Pacífico.
El coordinador de la Oficina Subregional de la FAO para Mesoamérica, Ignacio Rivera, dijo esta semana en Panamá que la sequía ha sido 'muy severa en este ciclo', en especial en el Corredor Seco que abarca las costas pacíficas de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá.
'Se espera un ciclo de poca agua hasta principios del 2016. Ha empezado a llover en fechas recientes, pero lo que traemos es un déficit en las regiones agrícolas', declaró Rivera a Efe.
El director internacional del Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño (CIIFEN), Rodney Martínez, dijo esta semana a Efe que El Niño está 'fuerte en el Pacífico', y que la discusión científica ahora se centra en asuntos como qué intensidad llegará a tener y hasta cuándo se va a extender.
Se presume 'que el máximo de este Niño se alcance entre noviembre de este año y enero de 2016, sin que signifique esto que durante estos meses no esté afectando', añadió el representante del CIIFEN, con sede en Guayaquil, suroeste de Ecuador. EFE