Tegucigalpa, Honduras.
En vista de que los pronósticos meteorológicos vaticinan escasez de lluvias, la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) ya ideó un plan para que los cultivos no perezcan por falta de agua.
Se trata de los proyectos denominados cosecha de agua, consistentes en la construcción de lagunas o resumideros de agua con la dimensión suficiente para satisfacer la demanda de agua en el extenso verano.
Estas lagunas se ubican en lugares estratégicos, generalmente donde hay corrientes, arroyos subterráneos o nacimientos de agua.
Para ser beneficiarios de estos proyectos solo se requiere que un grupo de al menos cinco productores se aglutinen, dispongan de un predio y hagan la solicitud al Gobierno.
Las solicitudes son atendidas según la priorización hecha por la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).
Prioridad uno son, para el caso, las comunidades del corredor seco del territorio.
“La meta es construir 2,800 cosechas de agua para atender a igual número de familias”, enfatizó Antonio Aragón, experto en irrigación de la SAG.
En vista de que los pronósticos meteorológicos vaticinan escasez de lluvias, la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) ya ideó un plan para que los cultivos no perezcan por falta de agua.
Se trata de los proyectos denominados cosecha de agua, consistentes en la construcción de lagunas o resumideros de agua con la dimensión suficiente para satisfacer la demanda de agua en el extenso verano.
Estas lagunas se ubican en lugares estratégicos, generalmente donde hay corrientes, arroyos subterráneos o nacimientos de agua.
Para ser beneficiarios de estos proyectos solo se requiere que un grupo de al menos cinco productores se aglutinen, dispongan de un predio y hagan la solicitud al Gobierno.
Las solicitudes son atendidas según la priorización hecha por la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).
Prioridad uno son, para el caso, las comunidades del corredor seco del territorio.
“La meta es construir 2,800 cosechas de agua para atender a igual número de familias”, enfatizó Antonio Aragón, experto en irrigación de la SAG.
