Tegucigalpa, Honduras
El Hospital Escuela confirmó ayer la primera muerte por virus de chikungunya en el país.
Se trata de un menor de apenas 23 días de nacido, proveniente de Olancho.
La madre del niño fue identificada como Carolina de Jesús Bustillo. El nombre del recién nacido no fue proporcionado por las autoridades.
El bebé fue ingresado desde el 18 de febrero con fiebre alta, alergia en todo el cuerpo y dificultad respiratoria, condición que hizo imposible a los médicos salvarle la vida.
Según la jefa de epidemiología, Roxana Araujo, la confirmación de las causas de muertes fue posible hasta que se hicieron los exámenes médicos.
Añadió que estos análisis consisten en pruebas llamadas PCR, las cuales se usan para la detección de virus. Los resultados fueron recibidos vía correo en horas de la noche del miércoles.
“No se pudo salvar la vida de este niño por sus múltiples complicaciones”, declaró Araujo.
Explicó que el menor enfrentó una sepsis neonatal, es decir, una infección bacteriana que se presenta generalmente en niños menores de 90 días.
Detalló que además del bebé hay cinco miembros de esa misma familia que han presentado los síntomas del virus en menos de 15 días.
Esta muerte encendió las alarmas en el sistema de salud, el cual rápidamente se pronunció sobre el hecho. En cuanto al chikungunya se sabe que los malestares son muy parecidos a los del dengue y que ambas enfermedades se contagian por el mosquito Aedes aegypti, caracterizado por tener una especie de rayas blancas en las patas.
Las personas que padecen estas enfermedades presentan fiebres altas, sarpullido en la mayor parte del cuerpo y dolor en las articulaciones.
Estas últimas molestias pueden permanecer en el cuerpo varias semanas e incluso meses.
En estos casos, los médicos recomiendan un estricto tratamiento basado en acetaminofén y la ingesta de gran cantidad de líquido, además de guardar mucho reposo para evitar el debilitamiento del sistema inmunológico.
