San Pedro Sula, Honduras.
A dos semanas del comienzo de un nuevo año escolar, miles de padres de familia abarrotaron los colegios y escuelas de San Pedro Sula para matricular a sus hijos.
Las expectativas de los jefes de hogar para este año es que la educación que reciben sus vástagos sea cada vez mejor y su aprendizaje les dé las herramientas necesarias para convertirse en ciudadanos competentes cuando se inserten en el ámbito laboral.
Los directores de los cuatro centros educativos más importantes de la ciudad, José Trinidad Reyes, Técnico Alemán, Primero de Mayo y el Intae, han manifestado que cumplirán con el inicio de clases, pese a las carencias de sus instituciones.
“Este año solo en el Primero de Mayo esperamos recibir a unos 900 alumnos de primer ingreso, más los 2,300 que ya tenemos en educación presencial y los 1,200 que estudian a distancia. Tenemos una población estudiantil bastante importante, pero no recibimos la ayuda que deberíamos de la Secretaría de Educación. Por ejemplo, si exigen mejor rendimiento de los maestros, que también programen capacitaciones. Se necesita mobiliario, material didáctico, seguridad, entre otras necesidades”, dijo Hilde Orlando Batiz, director del Primero de Mayo.
Entre los centros de educación insignes de la cuidad se pretende una matrícula de primer ingreso superior a los 3 mil alumnos.
Algunos padres de familia se manifestaron en contra del pago de mantenimiento de la institución como condición de matrícula.
“Esto es una matrícula maquillada y nos quieren ver la cara de tontos. Cómo es posible que tenga que gastar 1,500 lempiras para que mis hijos puedan estudiar. Los colegios han dejado de ser públicos y la educación sigue mediocre”, refirió Arturo Bueso, padre de familia.
Los progenitores han reportado que el cobro oscila entre L300 y L500, según la institución. Sin embargo, hay unos que se exceden y solicitan mil lempiras por alumno.
“Tengo una hija en la Normal Mixta y en cada cambio de semestre me piden mil lempiras por la bolsa. Eso es un robo y nadie dice nada. El ministro solo pone y pone nuevas normas, pero no regulan la extorsión que le hacen estos colegios a los padres”, expresó Ofelia Duarte, madre de familia.
José Antonio Alas, director del Intae, dijo que ellos matricularán a unos 300 alumnos de primer ingreso y que su capacidad estudiantil es de 3,000 estudiantes, aunque no le cierran las puertas a nadie.
“Los padres lo ven como matrícula, mas no es así.
Tenemos que ver cómo salir con los gastos de la institución sin ayuda del Gobierno. Además, hemos sido bastante flexibles con quienes no pueden pagar, les damos tiempo, cuotas y siempre hay quienes no cumplen; no obstante, solo por eso no sacamos a los alumnos, aunque eso nos traiga problemas a la hora de las auditorías, pues se reflejan más alumnos matriculados que el dinero recaudado”.
Aunque las clases inician el 2 de febrero, los institutos matricularán la primera semana de ese mes para darle tiempo a los padres de cumplir con los requisitos. Los alumnos esperan que este año sea similar al anterior: tranquilo y sin tropiezos.
A dos semanas del comienzo de un nuevo año escolar, miles de padres de familia abarrotaron los colegios y escuelas de San Pedro Sula para matricular a sus hijos.
Las expectativas de los jefes de hogar para este año es que la educación que reciben sus vástagos sea cada vez mejor y su aprendizaje les dé las herramientas necesarias para convertirse en ciudadanos competentes cuando se inserten en el ámbito laboral.
Los directores de los cuatro centros educativos más importantes de la ciudad, José Trinidad Reyes, Técnico Alemán, Primero de Mayo y el Intae, han manifestado que cumplirán con el inicio de clases, pese a las carencias de sus instituciones.
“Este año solo en el Primero de Mayo esperamos recibir a unos 900 alumnos de primer ingreso, más los 2,300 que ya tenemos en educación presencial y los 1,200 que estudian a distancia. Tenemos una población estudiantil bastante importante, pero no recibimos la ayuda que deberíamos de la Secretaría de Educación. Por ejemplo, si exigen mejor rendimiento de los maestros, que también programen capacitaciones. Se necesita mobiliario, material didáctico, seguridad, entre otras necesidades”, dijo Hilde Orlando Batiz, director del Primero de Mayo.
Entre los centros de educación insignes de la cuidad se pretende una matrícula de primer ingreso superior a los 3 mil alumnos.
 Si le falta un documento no podrá matricular.
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“Esto es una matrícula maquillada y nos quieren ver la cara de tontos. Cómo es posible que tenga que gastar 1,500 lempiras para que mis hijos puedan estudiar. Los colegios han dejado de ser públicos y la educación sigue mediocre”, refirió Arturo Bueso, padre de familia.
Los progenitores han reportado que el cobro oscila entre L300 y L500, según la institución. Sin embargo, hay unos que se exceden y solicitan mil lempiras por alumno.
“Tengo una hija en la Normal Mixta y en cada cambio de semestre me piden mil lempiras por la bolsa. Eso es un robo y nadie dice nada. El ministro solo pone y pone nuevas normas, pero no regulan la extorsión que le hacen estos colegios a los padres”, expresó Ofelia Duarte, madre de familia.
José Antonio Alas, director del Intae, dijo que ellos matricularán a unos 300 alumnos de primer ingreso y que su capacidad estudiantil es de 3,000 estudiantes, aunque no le cierran las puertas a nadie.
“Los padres lo ven como matrícula, mas no es así.
Tenemos que ver cómo salir con los gastos de la institución sin ayuda del Gobierno. Además, hemos sido bastante flexibles con quienes no pueden pagar, les damos tiempo, cuotas y siempre hay quienes no cumplen; no obstante, solo por eso no sacamos a los alumnos, aunque eso nos traiga problemas a la hora de las auditorías, pues se reflejan más alumnos matriculados que el dinero recaudado”.
Aunque las clases inician el 2 de febrero, los institutos matricularán la primera semana de ese mes para darle tiempo a los padres de cumplir con los requisitos. Los alumnos esperan que este año sea similar al anterior: tranquilo y sin tropiezos.
