La Teletón 2014 logró ayer una vez más que los hondureños aportaran su granito de arena que servirá para continuar esta gigantesca obra de amor.
Las aportaciones de todos hicieron que el cómputo de cierre fuera de 54,731,245 millones de lempiras.
La mayor felicidad la sintieron los miles de niños, niñas y adultos que reciben los servicios de la Teletón, ya que estos fondos contribuirán a cumplir sus sueños.
La atención que obtienen de forma gratuita en los centros de rehabilitación de Teletón en Tegucigalpa, San Pedro Sula, Olancho, Choluteca y Santa Rosa de Copán han permitido que miles de hondureños superen algún tipo de discapacidad sicomotora.
Esto significa para las personas con discapacidad una oportunidad de insertarse nuevamente o por primera vez en la sociedad. Además representa mejoras en la calidad de vida de las familias de quienes luchan por mejorar su condición.
En representación de los beneficiados por Teletón contaron sus testimonios seis niños: Jasiel Riz, Yerin Gonzales,Brayan Figueroa, Emili Alvarado, Alison Carrasco y Gabriela Vallejos.
Para extender estos servicios, Fundación Teletón determinó ayer destinar parte de los fondos recaudados en la construcción de un nuevo centro de rehabilitación integral para niños y niñas en La Esperanza, Intibucá.
 Niños beneficiados por atenciones de la Teletón compartieron sus historias.
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El presidente de Fundación Teletón, Rafael Ferrari, agradeció a los hondureños y las empresas solidarias por haberse ayudado con su aporte a la noble labor. La meta era de 50 millones de lempiras.
Cada lempira solidario sirvió en esta noble causa para alcanzar la anhelada meta. Desde el niño que donó un lempira en las caravanas de amor hasta las grandes compañías o grupos solidarios que regalaron millones dieron el ejemplo de la unión de una nación. Las firmas Diunsa, Elektra, Lady Lee, Kielsa, Emsula, Cervecería Hondureña, Ficohsa, Banco Atlántida, Tigo, Espresso Americano y Unitec dijeron presente. Pero la ayuda también llegó del sector público. El Gobierno aportó 12 millones, así como varias instituciones, entre estas las Fuerzas Armadas.
El presidente Juan Orlando Hernández, acompañado por su esposa Ana García y la ministra de Salud, Yolani Batres, entregó el cheque. “Hago entrega de 12 millones de lempiras a nombre de todos los hondureños”, le dijo el mandatario a Ferrari.
Las actividades
Estos donativos se entregaron alternados en medio de un espectáculo musical y artístico en que se destacó la presentación del actor y cantante Jencarlos Canela, Joey Montana, Ana Cirré, Karyme Lozano, Laureano Brizuela y Luis Ángel.
Desde las 9:00 pm del pasado viernes, los hondureños fueron testigos de presentaciones de altura que acompañaron las 27 horas de amor y solidaridad.
Los artistas nacionales no se quedaron atrás. Polache llenó de algarabía a los hondureños con sus famosas canciones de estilo trovador. Kazzabe y Santa Fe pusieron a bailar a todos al ritmo de la punta y también llegaron los Bohemios del Reguetón y Pilo Tejeda con la nueva versión musical de Sopa de caracol.
Al caer la tarde, Eduardo Andonie cautivó con su voz al ritmo de Color de esperanza y se unió en dueto con la reconocida cantante hondureña Jireh Wilson y su tema Sueña otra vez.
 Jencarlos Canela causó locura en el auditorio del Instituto San Miguel.
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La diversión se vivió al máximo en dos escenarios: el primero en el gimnasio del Instituto Salesiano San Miguel y el segundo en una cancha deportiva de la misma institución.
Este último predio se convirtió desde las 8:00 am de ayer en una feria en que, además de promover la venta de los promoteletones, se disfrutó de la participación artística de los payasos, cantantes, grupos musicales y varios DJ, entre otros. En este sitio no podía faltar la belleza femenina de las bailarinas del grupo zona sur y de las palillonas y pomponeras del Instituto Renacimiento.
Mientras en San Pedro Sula, el mal tiempo que imperó no impidió que los sampedranos se tocaran el corazón y apoyaran con todo a la Teletón. Las personas dieron sus donativos a los más de 500 voluntarios que permanecieron en sitios estratégicos, semáforos, centros comerciales, Central Metropolitana de Buses y en las entradas y salidas de la ciudad con los tradicionales botellones recogiendo los donativos.
Los botellones
Los hondureños también compartieron lo poco que tenían con la esperanza de ayudar a los hermanos que necesitan una mano solidaria. Lo hicieron mientras caminaban por las calles, se trasladaban en bús o desde la ventanilla de sus autos. Así fue recaudada la ayuda del pueblo, que depositó el lempira solidario en cada uno de los más de 2,500 botellones distribuidos a nivel nacional.
En esta actividad participaron más de 2,000 voluntarios.
 Esta voluntaria decidió subir a un autobús para pedir una pequeña contribución.
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