El ex ministro de Educación, Rafael Pineda Ponce, la emprendió ayer contra el presidente Mel Zelaya, de quien lamentó que está gobernando con una dosis de 'teatralidad' y de una 'forma circense' que ya está haciendo historia en el país.
El ex funcionario pidió a los liberales hacer algo para que su partido 'vuelva a su doctrina, a sus principios, a su rica historia', dando a entender que el mandatario se ha salido de la línea de la institución política que lo llevó al poder.
Interés
Pineda Ponce, un veterano líder del liberalismo, ex presidente del Congreso, ex presidente del Consejo Central Ejecutivo y ex candidato presidencial, aclaró que no está resentido con el presidente Zelaya por haber salido -hace nueves meses- del Gabinete de Gobierno.
Resaltó que no tiene interés en ver al número uno de la Casa de Gobierno, pero 'si eventualmente nos encontráramos en alguna calle, festín, bar, en restaurante, en algún estanco, nos damos la mano respetuosa y cordialmente'.
'Con el Presidente no me he vuelto a reunir desde que prescindió de mis servicios, no lo hizo directamente, porque ese gusto no quise dárselo. Renuncié. Creo que tenía lista la guillotina para cortarme la cabeza y no lo he vuelto a ver ni tengo interés', dijo a la HRN.
Teatro
'No me gusta la forma como gobierna al país. No soy partidario de esa teatralidad y esa forma circense de dirigir un país en una época tan convulsa y tan difícil de la historia de la nación', añadió.
¿Está haciendo teatro el Presidente?, se le preguntó desde cabina y respondió: 'Para mí ni siquiera buen teatro'. ¿Por qué? 'Se dirige -el país- con los rumores callejeros y las asambleas populares en las cuales no hay ninguna determinación, ningún punto de contacto con las preocupaciones del pueblo'. También condenó el apoyo que subrepticiamente da Zelaya a las aspiraciones presidenciales de Patricia Rodas. 'Rodas Alvarado es un símbolo permanente del partido, pero que se propicie desde el Gobierno, con fondos del Gobierno, con bienes del Gobierno, con intereses del Gobierno, candidaturas, no los diferencia en nada de nuestros amigos del Partido Nacional', cuestionó.
Lo dijo
'Una cosa es elegirlo -al Presidente-, una cosa es que el pueblo crea que esa persona es una respuesta a las preocupaciones y urgencias y circunstancias de la vida nacional y otra cosa es el desempeño. Una cosa es el partido y otra cosa es la persona'.
Rafael Pineda Ponce
