Estas pruebas revelan que la jefa de la Atic fue asesinada, según forenses

Según expertos forenses, la escena del crimen refleja cómo se modificaron los objetos, e incluso, cómo se plantó otra “escena” para fingir un suicidio.

Las pruebas científicas revelan que la jefa de la Atic primero fue asfixiada y luego colocaron su cuerpo en la cama, de acuerdo con médicos forenses.

El teléfono celular fue sumergido en un recipiente con agua para tratar de ocultar evidencia. Esto solo lo realiza alguien experto en recolección de pruebas de una escena del crimen, según el experto forense Castro Bobadilla.

Su celular, Huawei blanco, tiene tres posiciones diferentes en el lugar donde murió, según las fotos aportadas por los agentes de la Atic en la consignación del acta de levantamiento.

Para Castro Bobadilla, una persona que va cometer un suicidio no va colocar su teléfono en agua.

La autopsia psicológica describe el perfil de la profesional de Sherill Hernández como: “Nunca tuvo un perfil suicida”.

El arma en su mano derecha con orientación hacia la sien fue puesta para fingir el suicidio. Cuando una persona se dispara, la detonación de la pistola no le pudo dejar la mano con el arma cerca de la cabeza. Según el forense, cuando un arma se dispara hay una reacción de fuerza lo que impulsa la mano, separando el arma del lugar donde se realizó el disparo.

Según una fuente fiscal, la prueba de absorción atómica, que buscaba residuos de plomo, bario y antimonio en el dorso de las manos de Sherill dio negativa.

Los golpes en las piernas y cuello mostraron que la asfixiaron. Tenía hematomas en la parte frontal del cuello. 'Su lengua estaba salida de la boca como si minutos antes de su deceso habría hecho un intento por alcanzar oxígeno a causa de una posible asfixia', explicó el doctor Castro Bobadilla.

'La sangre corrió sobre la parte frontal de su dorso, según las manchas de su ropa, algo que contradice la postura que registró la Atic al ubicarla en la escena boca arriba, ya que al estar en esta posición al momento del disparo, la sangre tuvo que haber corrido hacia atrás de su cabeza', demostró.