El Gobierno de Estados Unidos, presidido por Donald Trump, planea ahora alargar la detención de familias de inmigrantes indocumentados durante meses en lugar de dejarlas en libertad, según documentos judiciales presentados ayer.
“El Gobierno no separará a las familias, sino que las mantendrá unidas mientras se tramiten los procedimientos de inmigración, cuando sean detenidos en o entre los puertos de entrada”, expresaron abogados del Departamento de Justicia.
Triste panorama
Estos trámites pueden alargarse durante meses e incluso años.
Hasta ahora, las familias quedaban en libertad por la práctica de “atrapar y liberar”, pero Trump quiere acabar con esta medida.
Es por eso que el presidente implementó la tolerancia cero, con la que separaba a las familias imputando delitos migratorios a los padres para enviarlos a la cárcel mientras recluía a los niños en albergues.
Pero Trump suspendió su política de tolerancia cero tras separar a unos 2,500 menores de sus padres por el gran rechazo que causó nacional e internacionalmente.
Además, la justicia ordenó reunificar a los niños con sus padres, por ello el Gobierno debe liberar a las familias según el acuerdo “Flores” de 1997, que no permite detener a menores por más de 20 días.
Es este acuerdo “Flores” el que Trump quiere modificar ahora para poder mantener detenidas a las familias indefinidamente mientras se resuelven sus procesos judiciales migratorios y su posible deportación.
El documento presentado por el Gobierno ante un tribunal federal de California solo explicita que detendrá a las familias “mientras se tramiten los procesos de inmigración”.
Preparándose
El Pentágono no descarta habilitar nuevas bases militares para albergar a inmigrantes indocumentados. “Estamos evaluando otras instalaciones adicionales para poder distribuir a las personas acogidas y manejar mejor la población presente en las bases”, dijo ayer el coronel Robert Manning, portavoz del Departamento de Defensa.