Washington, Estados Unidos.
La hondureña Marta Rodríguez salió bien librada de una cita que tenía en la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE). Estar al borde de la deportación le quitaba la tranquilidad.
Rodríguez, una empleada doméstica y madre de seis niños, ha cumplido con cada cita desde 2009, pero bajo la Administración Trump ICE le dijo que se alistara para una eventual deportación. La connacional cobró notoriedad ayer al llegar acompañada de líderes cívicos y religiosos a su cita con el ICE en Baltimore ( Maryland). Aunque por ahora se salvó de la deportación, tendrá que regresar en julio.
Es una historia de zozobra que se repite a diario y por montones en comunidades inmigrantes en todo el país: inmigrantes indocumentados que cumplen con su cita y salen con una moratoria o con una orden final de deportación. Al salir de las oficinas de ICE en Baltimore, Rodríguez recibió el abrazo de dos de sus hijos, ruidosos aplausos y gritos de “sí se puede”.
Emocionada hasta las lágrimas, Rodríguez respondió con un “sí, se puede” y agradeció el apoyo de los activistas, al señalar que inmigrantes que sufren como ella necesitan esas señales de solidaridad.
Asimismo, ella contó que iniciará trámites para solicitar asilo político, pese a que la Administración Trump está poniendo trabas a ese proceso. ICE no suele comentar casos específicos, pero en general mantiene que los inmigrantes tienen derecho al debido proceso, no obstante, una vez que reciben una orden de deportación final tienen que cumplirla.
La hondureña Marta Rodríguez salió bien librada de una cita que tenía en la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE). Estar al borde de la deportación le quitaba la tranquilidad.
Rodríguez, una empleada doméstica y madre de seis niños, ha cumplido con cada cita desde 2009, pero bajo la Administración Trump ICE le dijo que se alistara para una eventual deportación. La connacional cobró notoriedad ayer al llegar acompañada de líderes cívicos y religiosos a su cita con el ICE en Baltimore ( Maryland). Aunque por ahora se salvó de la deportación, tendrá que regresar en julio.
Es una historia de zozobra que se repite a diario y por montones en comunidades inmigrantes en todo el país: inmigrantes indocumentados que cumplen con su cita y salen con una moratoria o con una orden final de deportación. Al salir de las oficinas de ICE en Baltimore, Rodríguez recibió el abrazo de dos de sus hijos, ruidosos aplausos y gritos de “sí se puede”.
Emocionada hasta las lágrimas, Rodríguez respondió con un “sí, se puede” y agradeció el apoyo de los activistas, al señalar que inmigrantes que sufren como ella necesitan esas señales de solidaridad.
Asimismo, ella contó que iniciará trámites para solicitar asilo político, pese a que la Administración Trump está poniendo trabas a ese proceso. ICE no suele comentar casos específicos, pero en general mantiene que los inmigrantes tienen derecho al debido proceso, no obstante, una vez que reciben una orden de deportación final tienen que cumplirla.