Tegucigalpa, Honduras.
La Secretaría de Educación afirmó a LA PRENSA que las guías metodológicas “ Cuidando mi salud y mi vida”, conocidas como guías de educación sexual, ya están en uso en centros escolares de 17 comunidades del país.
Sin embargo, miembros de la Confraternidad Evangélica aseguraron no haber consensuado el contenido de las mismas.
Los materiales didácticos en Lempira están siendo usados en las comunidades de Gracias, San Manuel de Colohete, La Campa, Erandique, La Virtud y La Unión; en Intibucá llegó a Jesús de Otoro, Masaguara e Intibucá, y en La Paz se implementa en San Pedro de Tutule, Santa María, San José, Cabañas, Santa Elena, Aguanqueterique, Opatoro y La Paz.
En todos estos lugares ya se está trabajando con las guías metodológicas, detalló Lourdes Cartagena, directora general de servicios educativos de la Secretaría de Salud.
Las guías fueron elaboradas con base en las expectativas de logro definidas en el Currículo Nacional Básico en las áreas de Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, Español, Matemáticas y Educación Física, por lo que se capacitó a 22,000 maestros.
Polémica
Desde 2008, cuando se implementaron las guías, diversos sectores se manifestaron en contra del material por considerar que se incitaba a los niños y jóvenes a iniciar de forma prematura una vida sexual activa.
A la fecha, el escenario se mantiene igual. Lourdes Cartagena aseguró que las guías ya habían sido revisadas y “se pudo constatar que son guías apegadas al Currículo Nacional Básico. La Iglesia siempre tiene su propia visión, sin embargo, al ver el contenido de las guías, que son integradoras y que abordan temas de formación personal, hicieron observaciones muy superficiales que nosotros acatamos; las guías carecen de ilustraciones, nos dijeron que se hiciera lo menos posible figuras de órganos. Y en contenido no hubo mayor crítica, pues realmente no hay mucho que criticar a las guías”, añadió Cartagena.
No obstante, Miguel Muñoz, director ejecutivo de la Confraternidad Evangélica, aseguró que ellos no han consensuado las guías con la Secretaría de Educación, al tiempo que reiteró estar en la disposición de participar en la construcción de una estrategia integral, siempre y cuando no se limite únicamente al campo biológico. “Las guías actuales no son de la aceptación ni de la Iglesia Evangélica ni de la Iglesia Católica. Hasta el año pasado no se habían distribuido y cada año hay presión para distribuirlas”, enfatizó Muñoz.
Con estas dos versiones, nuevamente se crea controversia sobre la inclusión de temas relacionados a la sexualidad en centros educativos.
Hoy se reunirán miembros de la Confraternidad Evangélica con autoridades de Educación para verificar si las recomendaciones que realizaron fueron acatadas. Cinco son los tomos que ha distribuido la Secretaría de Educación: uno para prebásica, que incluye temas de la familia y la concepción; educación básica trata sobre el cuerpo humano y las emociones; el segundo tomo para educación básica habla sobre el proyecto de vida y la procreación responsable; el tercero para educación básica incluye el noviazgo y embarazo en adolescentes, y el último está dirigido a los padres de familia con el objetivo de fortalecer su participación activa.
La Secretaría de Educación afirmó a LA PRENSA que las guías metodológicas “ Cuidando mi salud y mi vida”, conocidas como guías de educación sexual, ya están en uso en centros escolares de 17 comunidades del país.
Sin embargo, miembros de la Confraternidad Evangélica aseguraron no haber consensuado el contenido de las mismas.
Los materiales didácticos en Lempira están siendo usados en las comunidades de Gracias, San Manuel de Colohete, La Campa, Erandique, La Virtud y La Unión; en Intibucá llegó a Jesús de Otoro, Masaguara e Intibucá, y en La Paz se implementa en San Pedro de Tutule, Santa María, San José, Cabañas, Santa Elena, Aguanqueterique, Opatoro y La Paz.
En todos estos lugares ya se está trabajando con las guías metodológicas, detalló Lourdes Cartagena, directora general de servicios educativos de la Secretaría de Salud.
Las guías fueron elaboradas con base en las expectativas de logro definidas en el Currículo Nacional Básico en las áreas de Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, Español, Matemáticas y Educación Física, por lo que se capacitó a 22,000 maestros.
Polémica
Desde 2008, cuando se implementaron las guías, diversos sectores se manifestaron en contra del material por considerar que se incitaba a los niños y jóvenes a iniciar de forma prematura una vida sexual activa.
A la fecha, el escenario se mantiene igual. Lourdes Cartagena aseguró que las guías ya habían sido revisadas y “se pudo constatar que son guías apegadas al Currículo Nacional Básico. La Iglesia siempre tiene su propia visión, sin embargo, al ver el contenido de las guías, que son integradoras y que abordan temas de formación personal, hicieron observaciones muy superficiales que nosotros acatamos; las guías carecen de ilustraciones, nos dijeron que se hiciera lo menos posible figuras de órganos. Y en contenido no hubo mayor crítica, pues realmente no hay mucho que criticar a las guías”, añadió Cartagena.
No obstante, Miguel Muñoz, director ejecutivo de la Confraternidad Evangélica, aseguró que ellos no han consensuado las guías con la Secretaría de Educación, al tiempo que reiteró estar en la disposición de participar en la construcción de una estrategia integral, siempre y cuando no se limite únicamente al campo biológico. “Las guías actuales no son de la aceptación ni de la Iglesia Evangélica ni de la Iglesia Católica. Hasta el año pasado no se habían distribuido y cada año hay presión para distribuirlas”, enfatizó Muñoz.
Con estas dos versiones, nuevamente se crea controversia sobre la inclusión de temas relacionados a la sexualidad en centros educativos.
Hoy se reunirán miembros de la Confraternidad Evangélica con autoridades de Educación para verificar si las recomendaciones que realizaron fueron acatadas. Cinco son los tomos que ha distribuido la Secretaría de Educación: uno para prebásica, que incluye temas de la familia y la concepción; educación básica trata sobre el cuerpo humano y las emociones; el segundo tomo para educación básica habla sobre el proyecto de vida y la procreación responsable; el tercero para educación básica incluye el noviazgo y embarazo en adolescentes, y el último está dirigido a los padres de familia con el objetivo de fortalecer su participación activa.