Tegucigalpa, Honduras.
El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, y el secretario general de la OEA, Luis Almagro, han acercado posiciones esta semana luego de una polémica denuncia de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras ( Maccih), sobre presunta corruptela en el Parlamento local.
La polémica se dio luego de que la Maccih, que depende de la OEA, denunció la semana pasada que una reforma a la Ley Orgánica del Presupuesto del país, del 18 de enero, aprobada por el Parlamento, fue trastocada en su texto, lo que el vocero de esa misión, Juan Jiménez, calificó como 'un delito'.
Dos artículos de esa ley fueron reformados por el Parlamento en su anterior legislatura con el fin de 'frenar' las investigaciones a altos funcionarios y diputados, incluido el titular del legislativo, Mauricio Oliva, dijo Jiménez.
La denuncia fue rechazada por el Parlamento, que atribuyó la publicación que dio pie a la denuncia de Jiménez a una 'fe de errata', y calificó de malintencionadas sus declaraciones.
La Maccih y diversos sectores del país recomiendan la derogación de la reforma aprobada y han cuestionado fuerte a los diputados.
Hernández reaccionó pidiendo a Almagro 'retomar las mesas de diálogo' entre su país y la OEA 'sobre temas de interés mutuo'.
El lunes, Hernández basó su petición 'en consideración al deseo del Gobierno de Honduras de obtener los mejores resultados de la cooperación con la Organización de Estados Americanos, y en función de los propósitos con los cuales Honduras ha suscrito compromisos internacionales en materia de lucha contra la corrupción'.
La Maccih se instaló en Honduras en abril de 2016 por un acuerdo entre el Gobierno de Hernández y la OEA, y su presencia en el país se dio entre el respaldo de muchos sectores y el rechazo de otros.
Hernández expresó además a Almagro que su Gobierno 'procura fortalecer el Estado de derecho, sus propias instituciones y la construcción de confianza entre gobernantes y gobernados'.
Además, le indicó que siendo que ambas partes están comprometidas en la lucha contra la corrupción y la impunidad, Honduras considera que 'toda controversia entre las partes, relacionada con la interpretación o con la aplicación del Convenio, debe de resolverse mediante los procedimientos establecidos en dicho Convenio'.
Almagro le respondió el mismo lunes a Hernández diciéndole que coincide con él en 'la importancia de profundizar, fortalecer e incrementar la presencia en el país de la Maccih, así como de sus capacidades en materia de investigación y sanción de actos ilícitos en materia de corrupción'.
'Del mismo modo, comparto que en caso de surgir objeciones por parte del Gobierno de Honduras respecto a los trabajos llevados a cabo por la Maccih, las mismas deben ser dirimidas al amparo de lo establecido en los instrumentos jurídicos oportunamente firmados entre ambas partes', añade la respuesta del titular de la OEA.
Además, le reiteró su 'disposición de proceder a la brevedad inmediata a iniciar las conversaciones correspondientes para el establecimiento de los canales de trabajo conducentes a las acciones para el fortalecimiento de la institucionalidad democrática en el país y para las urgentes reformas electorales'.
Almagro ratificó su mensaje a Hernández anunciando la designación del expresidente de Guatemala Álvaro Colom como representante para retomar las mesas de diálogo entre Honduras y la OEA.
La Presidencia de Honduras también respondió, el martes, en la red social Twitter, declarándose 'lista' para recibir a Colom la próxima semana y 'definir la agenda temática y los tiempos para encontrar las soluciones a los altos intereses del país'.
Almagro dijo tener 'la certeza' de que Colom 'impulsará las conversaciones con apego a los principios de la Carta Democrática Interamericana' para 'lograr el fortalecimiento de la institucionalidad democrática y las urgentes reformas electorales que Honduras reclama'.
El intercambio de mensajes entre Hernández y Almagro se dio luego de que el vocero de la Maccih viajó el domingo a Washington atendiendo un llamamiento del secretario general de la OEA.
El acercamiento de posiciones entre Almagro y Hernández supone que las aguas estarían volviendo a la normalidad con el vocero de la Maccih, quien incluso denunció la semana pasada que personas corruptas en el país han contratado una firma internacional para investigarle, tras denunciar varios casos de corrupción.
Esas personas ' seguramente son los corruptos que se han robado el dinero y están usando ese dinero para contratar una firma internacional para su propia impunidad', subrayó Jiménez, quien además dijo estar con su 'maleta lista' por si llegaran a declararle 'persona non grata' en Honduras.
El presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, y el secretario general de la OEA, Luis Almagro, han acercado posiciones esta semana luego de una polémica denuncia de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras ( Maccih), sobre presunta corruptela en el Parlamento local.
La polémica se dio luego de que la Maccih, que depende de la OEA, denunció la semana pasada que una reforma a la Ley Orgánica del Presupuesto del país, del 18 de enero, aprobada por el Parlamento, fue trastocada en su texto, lo que el vocero de esa misión, Juan Jiménez, calificó como 'un delito'.
Dos artículos de esa ley fueron reformados por el Parlamento en su anterior legislatura con el fin de 'frenar' las investigaciones a altos funcionarios y diputados, incluido el titular del legislativo, Mauricio Oliva, dijo Jiménez.
La denuncia fue rechazada por el Parlamento, que atribuyó la publicación que dio pie a la denuncia de Jiménez a una 'fe de errata', y calificó de malintencionadas sus declaraciones.
La Maccih y diversos sectores del país recomiendan la derogación de la reforma aprobada y han cuestionado fuerte a los diputados.
Hernández reaccionó pidiendo a Almagro 'retomar las mesas de diálogo' entre su país y la OEA 'sobre temas de interés mutuo'.
El lunes, Hernández basó su petición 'en consideración al deseo del Gobierno de Honduras de obtener los mejores resultados de la cooperación con la Organización de Estados Americanos, y en función de los propósitos con los cuales Honduras ha suscrito compromisos internacionales en materia de lucha contra la corrupción'.
La Maccih se instaló en Honduras en abril de 2016 por un acuerdo entre el Gobierno de Hernández y la OEA, y su presencia en el país se dio entre el respaldo de muchos sectores y el rechazo de otros.
Hernández expresó además a Almagro que su Gobierno 'procura fortalecer el Estado de derecho, sus propias instituciones y la construcción de confianza entre gobernantes y gobernados'.
Además, le indicó que siendo que ambas partes están comprometidas en la lucha contra la corrupción y la impunidad, Honduras considera que 'toda controversia entre las partes, relacionada con la interpretación o con la aplicación del Convenio, debe de resolverse mediante los procedimientos establecidos en dicho Convenio'.
Almagro le respondió el mismo lunes a Hernández diciéndole que coincide con él en 'la importancia de profundizar, fortalecer e incrementar la presencia en el país de la Maccih, así como de sus capacidades en materia de investigación y sanción de actos ilícitos en materia de corrupción'.
'Del mismo modo, comparto que en caso de surgir objeciones por parte del Gobierno de Honduras respecto a los trabajos llevados a cabo por la Maccih, las mismas deben ser dirimidas al amparo de lo establecido en los instrumentos jurídicos oportunamente firmados entre ambas partes', añade la respuesta del titular de la OEA.
Además, le reiteró su 'disposición de proceder a la brevedad inmediata a iniciar las conversaciones correspondientes para el establecimiento de los canales de trabajo conducentes a las acciones para el fortalecimiento de la institucionalidad democrática en el país y para las urgentes reformas electorales'.
Almagro ratificó su mensaje a Hernández anunciando la designación del expresidente de Guatemala Álvaro Colom como representante para retomar las mesas de diálogo entre Honduras y la OEA.
La Presidencia de Honduras también respondió, el martes, en la red social Twitter, declarándose 'lista' para recibir a Colom la próxima semana y 'definir la agenda temática y los tiempos para encontrar las soluciones a los altos intereses del país'.
Almagro dijo tener 'la certeza' de que Colom 'impulsará las conversaciones con apego a los principios de la Carta Democrática Interamericana' para 'lograr el fortalecimiento de la institucionalidad democrática y las urgentes reformas electorales que Honduras reclama'.
El intercambio de mensajes entre Hernández y Almagro se dio luego de que el vocero de la Maccih viajó el domingo a Washington atendiendo un llamamiento del secretario general de la OEA.
El acercamiento de posiciones entre Almagro y Hernández supone que las aguas estarían volviendo a la normalidad con el vocero de la Maccih, quien incluso denunció la semana pasada que personas corruptas en el país han contratado una firma internacional para investigarle, tras denunciar varios casos de corrupción.
Esas personas ' seguramente son los corruptos que se han robado el dinero y están usando ese dinero para contratar una firma internacional para su propia impunidad', subrayó Jiménez, quien además dijo estar con su 'maleta lista' por si llegaran a declararle 'persona non grata' en Honduras.