San Pedro Sula, Honduras.
Con tomas de vías, barricadas, incendio de neumáticos y encapuchados amenazando a los conductores, amanecieron de nuevo las principales ciudades de Honduras por parte de seguidores de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, cuyo candidato Salvador Nasralla, asegura que ha sido víctima de un fraude en las elecciones del 26 de noviembre.
El clima es atizado con una intensa campaña de desinformación y terror en las redes sociales, donde abundan videos, amenazas de incendio, destrucción y noticias falsas que mantienen en zozobra a la población.
La protesta atendió el llamado del coordinador de Libre, Manuel Zelaya, en rechazo al informe del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que declaró este domingo presidente electo al candidato del Partido Nacional y presidente del país, Juan Orlando Hernández.
Anoche, en Tegucigalpa, muchos centros comerciales cerraron antes de las 6:00 pm, mientras que en San Pedro Sula fue saqueada una tienda de artículos deportivos, hubo disturbios en la avenida Circunvalación y barricadas con quema de llantas en las salidas de la ciudad y en los accesos de populosas colonias que impiden que las personas puedan regresar a sus casas.
El secretario ejecutivo del Consejo de Ministros, Ebal Díaz, declaró hoy que “detrás está el crimen organizado”, al referirse a los disturbios derivados de las elecciones generales del 26 de noviembre y a la declaratoria del presidente Juan Orlando Hernández como ganador.
En los puntos de peaje, pandilleros siguieron hoy cobrando libremente impuestos de 100 a 500 lempiras, unos 20 dólares, por dejar pasar vehículos, en ciudades que parecieran estar a merced del vandalismo.
A eso de las 6:00 los militares llegaron a puntos estratégicos como Megaplaza en San Pedro Sula donde una tienda fue saqueada para habilitar el paso a los conductores y peatones que viajaban rumbo a sus trabajos.
Con tomas de vías, barricadas, incendio de neumáticos y encapuchados amenazando a los conductores, amanecieron de nuevo las principales ciudades de Honduras por parte de seguidores de la Alianza de Oposición contra la Dictadura, cuyo candidato Salvador Nasralla, asegura que ha sido víctima de un fraude en las elecciones del 26 de noviembre.
El clima es atizado con una intensa campaña de desinformación y terror en las redes sociales, donde abundan videos, amenazas de incendio, destrucción y noticias falsas que mantienen en zozobra a la población.
La protesta atendió el llamado del coordinador de Libre, Manuel Zelaya, en rechazo al informe del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que declaró este domingo presidente electo al candidato del Partido Nacional y presidente del país, Juan Orlando Hernández.
Anoche, en Tegucigalpa, muchos centros comerciales cerraron antes de las 6:00 pm, mientras que en San Pedro Sula fue saqueada una tienda de artículos deportivos, hubo disturbios en la avenida Circunvalación y barricadas con quema de llantas en las salidas de la ciudad y en los accesos de populosas colonias que impiden que las personas puedan regresar a sus casas.
El secretario ejecutivo del Consejo de Ministros, Ebal Díaz, declaró hoy que “detrás está el crimen organizado”, al referirse a los disturbios derivados de las elecciones generales del 26 de noviembre y a la declaratoria del presidente Juan Orlando Hernández como ganador.
En los puntos de peaje, pandilleros siguieron hoy cobrando libremente impuestos de 100 a 500 lempiras, unos 20 dólares, por dejar pasar vehículos, en ciudades que parecieran estar a merced del vandalismo.
A eso de las 6:00 los militares llegaron a puntos estratégicos como Megaplaza en San Pedro Sula donde una tienda fue saqueada para habilitar el paso a los conductores y peatones que viajaban rumbo a sus trabajos.
Las tomas son intermitentes obedeciendo a una estrategia de mantener colapsadas las principales vías y ocupadas a las fuerzas de seguridad.
 Los juzgados de San Pedro Sula fueron quemados por las turbas.
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 Un vehículo aparcado en el estacionamiento de lo juzgados sampedranos fue quemado.
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 El desvío a la colonia Felipe Zelaya amaneció tomado por pequeños grupos de personas.
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 A la altura del río Humuya en Santa Rita, Yoro, los manifestantes se tomaron la vía.
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