Tegucigalpa, Honduras.
Pese a las buenas condiciones en las que se encuentra el zoológico de Joya Grande, ubicado en Santa Cruz de Yojoa, este requiere de reparaciones y construcciones en sus instalaciones.
El zoológico, incautado por el Estado hace tres años, es manejado por la Oficina Administradora de Bienes Incautados ( Oabi), pero es rentado a una empresa que dirige la veterinaria María Díaz. La experta en cuidados de animales confesó a LA PRENSA que en los últimos meses ha bajado la cantidad de turistas al zoológico, el que se mantiene entre uno de los más novedosos de la región centroamericana.
“Ha bajado mucho la llegada de turistas al zoológico, creo que la economía del país está mal. Ahora tenemos más animales que antes, son unos 300 los que hay ahora”, manifestó Díaz.
Joya Grande se ha distinguido por la cantidad de especies de animales que tiene, siendo los más llamativos la jirafa, rinocerontes y camellos.
El manejo. Los arrendatarios mantienen los precios de entrada al zoológico igual que antes de su incautación por la Oabi. La entrada general vale 250 lempiras y para los niños de 5 a 11 cuesta L150.
Este centro de atracciones animales fue incautado por el Estado a los miembros de una familia acusada de lavado de activos, hoy presos en Estados Unidos.
“La Oabi me cobra una mensualidad por la renta del zoológico. Cuando hicimos el contrato quedaron pendientes algunas reparaciones que todavía no se han hecho”, explicó la veterinaria.
En la negociación, el arrendador quedó pendiente de arreglar algunas cuestiones de la madera, las que se han deteriorado con el tiempo, además de la construcción de nuevos recintos.
“El zoológico ha crecido, dejamos que los animales se reproduzcan, por lo que hay que construir nuevos recintos. Son muchas las necesidades que se tienen y estamos a la espera de que el Estado realice las reparaciones”, señaló Díaz, que aseguró que la Oabi se ha comprometido en realizar las reparaciones.
Costos. Los inquilinos pagan una cantidad determinada al Estado por usar y explotar las instalaciones turísticamente, sin embargo, no pueden hacer construcciones o reparaciones por no ser los propietarios. “Damos mantenimiento a los recintos, hemos construido algunos nuevos, pero no nos corresponde. Los animales se están reproduciendo y también estamos recibiendo a los que son decomisados por el Estado en operativos”, puntualizó la encargada.
LA PRENSA consultó sin éxito al director de la Oabi, José Luis Andino, sobre las reparaciones que han prometido realizar en el zoológico Joya Grande.
Pese a las buenas condiciones en las que se encuentra el zoológico de Joya Grande, ubicado en Santa Cruz de Yojoa, este requiere de reparaciones y construcciones en sus instalaciones.
El zoológico, incautado por el Estado hace tres años, es manejado por la Oficina Administradora de Bienes Incautados ( Oabi), pero es rentado a una empresa que dirige la veterinaria María Díaz. La experta en cuidados de animales confesó a LA PRENSA que en los últimos meses ha bajado la cantidad de turistas al zoológico, el que se mantiene entre uno de los más novedosos de la región centroamericana.
“Ha bajado mucho la llegada de turistas al zoológico, creo que la economía del país está mal. Ahora tenemos más animales que antes, son unos 300 los que hay ahora”, manifestó Díaz.
Joya Grande se ha distinguido por la cantidad de especies de animales que tiene, siendo los más llamativos la jirafa, rinocerontes y camellos.
El manejo. Los arrendatarios mantienen los precios de entrada al zoológico igual que antes de su incautación por la Oabi. La entrada general vale 250 lempiras y para los niños de 5 a 11 cuesta L150.
Este centro de atracciones animales fue incautado por el Estado a los miembros de una familia acusada de lavado de activos, hoy presos en Estados Unidos.
“La Oabi me cobra una mensualidad por la renta del zoológico. Cuando hicimos el contrato quedaron pendientes algunas reparaciones que todavía no se han hecho”, explicó la veterinaria.
En la negociación, el arrendador quedó pendiente de arreglar algunas cuestiones de la madera, las que se han deteriorado con el tiempo, además de la construcción de nuevos recintos.
“El zoológico ha crecido, dejamos que los animales se reproduzcan, por lo que hay que construir nuevos recintos. Son muchas las necesidades que se tienen y estamos a la espera de que el Estado realice las reparaciones”, señaló Díaz, que aseguró que la Oabi se ha comprometido en realizar las reparaciones.
Costos. Los inquilinos pagan una cantidad determinada al Estado por usar y explotar las instalaciones turísticamente, sin embargo, no pueden hacer construcciones o reparaciones por no ser los propietarios. “Damos mantenimiento a los recintos, hemos construido algunos nuevos, pero no nos corresponde. Los animales se están reproduciendo y también estamos recibiendo a los que son decomisados por el Estado en operativos”, puntualizó la encargada.
LA PRENSA consultó sin éxito al director de la Oabi, José Luis Andino, sobre las reparaciones que han prometido realizar en el zoológico Joya Grande.
