Lepaera, Honduras.
El mal estado del tramo carretero que une a Lepaera con las ciudades de Gracias, Lempira, y Santa Rosa de Copán fue constatado por el presidente Juan Orlando Hernández.
El titular del Poder Ejecutivo se refirió al tema en la entrega de proyectos de crías de especies menores que se realizó el fin de semana en la aldea La Estancia, del municipio de Lepaera, Lempira.
“Me vine manejando desde el estadio hasta este lugar y pude ver que esta carretera se está deteriorando, desde el desvío de la carretera que une a Gracias y Santa Rosa hasta Lepaera”, dijo Hernández, quien agregó que se pondrá en contacto con las autoridades respectivas para girar instrucciones.
Relató que durante la travesía intentó comunicarse con las autoridades de Insep (Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos) porque “lo primordial es evitar que presente mayores problemasesta carretera”.
Reparación rápida. El gobernante incluso instó a los medios de comunicación a que le ayuden a difundir el mensaje de que “se tiene que iniciar cuanto antes la reparación de esta carretera de Lepaera, antes de que se deteriore más”.
Remarcó que la vía de Santa Rosa a Gracias ya no presenta los problemas del pasado, así como ha sucedido de igual manera con la que conduce desde Gracias a La Esperanza, Intibucá.
Dentro del marco de reconstrucción y reparación de carreteras, afirmó que igual se pretende conectar a Gracias con los municipios de La Campa, luego con San Sebastián, hasta salir a la frontera con El Salvador, a Ocotepeque, llegando a Valladolid, cerrando todo el círculo para contar con vías de primer nivel.
“Esto de las carreteras tuvo que haber sido algo de toda la vida, como siempre tuvo que tenerlas Lempira, porque incluso se está haciendo el estudio para seguir con la carretera y pasar de Valladolid, así como la que unirá a Lepaera con San Nicolás”, dijo.
Programa gubernamental. Más de 65 familias de la aldea La Estancia recibieron animales y huertos del proyecto de cría de especies menores, iniciativa impulsada por el presidente Hernández y la primera dama, Ana García, el cual busca ofrecer seguridad alimentaria a los hondureños.
Un ejemplo de desarrollo integral es el de doña María Elena Portillo, quien ya recibió beneficios anteriormente y le mostró a la pareja presidencial los alcances que ha tenido el programa Vida Mejor en su vivienda y su predio de aproximadamente un cuarto de manzana.
Dijo que Vida Mejor no solo llegó para cambiarle su piso, que era de tierra por uno de cemento, dotarle de un ecofogón y un filtro de agua, sino que cuenta con un solar en el que tiene un huerto familiar.
Además, posee cultivos de plátanos, café, coco, licha, naranja, nances, guanábana, mango, cilantro, remolacha y rábano.
En la cría de especies menores, doña María es beneficiaria con gallinas (ponedoras de huevo) y una cerdita, la que tendrá sus primeros cerditos en septiembre próximo.
El programa consiste en dotar a una familia de cerdos, gallinas o cabros, además de un huerto, tiene el requerimiento primordial de que, a la primera producción de crías, el beneficiario actuará en solidaridad con un vecino.
A nivel nacional son 1,600 los núcleos familares que trabajan bajo el esquema reproductivo de especies menores.
El Presidente precisó que la cría de especies menores es para que los niños y las familias puedan tener mejores dietas alimenticias.
El mal estado del tramo carretero que une a Lepaera con las ciudades de Gracias, Lempira, y Santa Rosa de Copán fue constatado por el presidente Juan Orlando Hernández.
El titular del Poder Ejecutivo se refirió al tema en la entrega de proyectos de crías de especies menores que se realizó el fin de semana en la aldea La Estancia, del municipio de Lepaera, Lempira.
“Me vine manejando desde el estadio hasta este lugar y pude ver que esta carretera se está deteriorando, desde el desvío de la carretera que une a Gracias y Santa Rosa hasta Lepaera”, dijo Hernández, quien agregó que se pondrá en contacto con las autoridades respectivas para girar instrucciones.
| Alcance
Solo en Lempira, en los municipios de Belén, Lepaera, San Sebastián, San Manuel, Gracias y Talgua, son 340 las familias que han recibido la asistencia del novedoso programa.
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Reparación rápida. El gobernante incluso instó a los medios de comunicación a que le ayuden a difundir el mensaje de que “se tiene que iniciar cuanto antes la reparación de esta carretera de Lepaera, antes de que se deteriore más”.
Remarcó que la vía de Santa Rosa a Gracias ya no presenta los problemas del pasado, así como ha sucedido de igual manera con la que conduce desde Gracias a La Esperanza, Intibucá.
Dentro del marco de reconstrucción y reparación de carreteras, afirmó que igual se pretende conectar a Gracias con los municipios de La Campa, luego con San Sebastián, hasta salir a la frontera con El Salvador, a Ocotepeque, llegando a Valladolid, cerrando todo el círculo para contar con vías de primer nivel.
“Esto de las carreteras tuvo que haber sido algo de toda la vida, como siempre tuvo que tenerlas Lempira, porque incluso se está haciendo el estudio para seguir con la carretera y pasar de Valladolid, así como la que unirá a Lepaera con San Nicolás”, dijo.
Programa gubernamental. Más de 65 familias de la aldea La Estancia recibieron animales y huertos del proyecto de cría de especies menores, iniciativa impulsada por el presidente Hernández y la primera dama, Ana García, el cual busca ofrecer seguridad alimentaria a los hondureños.
Un ejemplo de desarrollo integral es el de doña María Elena Portillo, quien ya recibió beneficios anteriormente y le mostró a la pareja presidencial los alcances que ha tenido el programa Vida Mejor en su vivienda y su predio de aproximadamente un cuarto de manzana.
Dijo que Vida Mejor no solo llegó para cambiarle su piso, que era de tierra por uno de cemento, dotarle de un ecofogón y un filtro de agua, sino que cuenta con un solar en el que tiene un huerto familiar.
Además, posee cultivos de plátanos, café, coco, licha, naranja, nances, guanábana, mango, cilantro, remolacha y rábano.
En la cría de especies menores, doña María es beneficiaria con gallinas (ponedoras de huevo) y una cerdita, la que tendrá sus primeros cerditos en septiembre próximo.
El programa consiste en dotar a una familia de cerdos, gallinas o cabros, además de un huerto, tiene el requerimiento primordial de que, a la primera producción de crías, el beneficiario actuará en solidaridad con un vecino.
A nivel nacional son 1,600 los núcleos familares que trabajan bajo el esquema reproductivo de especies menores.
El Presidente precisó que la cría de especies menores es para que los niños y las familias puedan tener mejores dietas alimenticias.
