Catacamas, Olancho
De día y noche, los siete días a la semana, el trabajo de obreros y técnicos es permanente en la obra gris del proyecto hidroeléctrico Patuca III, que abastecerá de energía a los departamentos de Olancho, El Paraíso y Gracias a Dios.
La obra está avanzada en un 70%, se espera que para julio comience la limpieza del embalse que se hará en dos fases.
| 1,100
empleos para hondureños Pobladores de comunidades adyacentes al proyecto se benefician laborando en diferentes cargos, lo que para ellos representa desarrollo.
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“Estamos trabajando en varios frentes, la subdirección ambiental prepara el proceso para la limpieza del embalse que se hará cumpliendo con las medidas de mitigación ambiental que establece el contrato que se firmó con la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente”, explicó Álvaro Ramírez, subdirector técnico de la Unidad Especial de Proyectos de Energía Renovable (Ueper).
Se espera que en 45 días llegue a Puerto Cortés la primera de dos turbinas tipo Kaplan con el fin de comenzar el proceso de instalación.
| La instalación de grúas en casa de máquinas avanza.
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Turbinas
Se preparan todos los equipos electromecánicos en la casa de máquinas, adonde se han hecho las soldaduras en estructura de caracol para la instalación de la turbina número 1 que generará 52 megavatios.
Expertos de mantenimiento de la represa El Cajón se encuentran en China inspeccionando y efectuando pruebas de aceptación de la turbina número 1 con técnicos de la fábrica antes de enviarla a Honduras.
“Un grupo de técnicos supervisa las pruebas que se hacen en China antes de traer la turbina al país. Una vez que cumplan los estándares se enviará para que sea instalada y comience a operar”, dijo Fabricio Lobo, técnico del proyecto.
En lo que se refiere a la segunda turbina, los técnicos informaron que se programan evaluaciones para el 15 de julio, después que los técnicos lo acepten llegaría al país entre septiembre y octubre de este año.
| Las panorámicas muestran los avances del megaproyecto, cuya obra gris se encuentra en un 70% a la espera de la instalación de los equipos para que empiece a operar el segundo semestre de 2018.
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Líneas de transmisión
Parte importante del proceso es el diseño de las líneas de transmisión que llevarán la energía hasta una subestación que se ubicará en Juticalpa, Olancho.
“Se espera terminar los diseños de la línea de transmisión que va de Patuca hasta Juticalpa, esto esperamos hacerlo en los próximos meses cumpliendo con los estándares que exige la Empresa Nacional de Energía Eléctrica”, agregó Ramírez. Se avanza además en la construcción de los pilares que llegarán a una altura de 294 metros dentro del plantel, adonde también se construye un armado de acero en el túnel de conducción.
El proceso también incluye el rescate de los sitios o vestigios arqueológicos que han sido identificados por el Instituto Hondureños de Antropología e historia (IHAH), a lo largo de los 51.86 kilómetros cuadrados de extensión del proyecto, hasta la cota 290 metros sobre el nivel del mar.
Para los técnicos, el proyecto avanza conforme lo establecido en lo que denominan la ruta crítica.
“Estamos en tiempo, se avanza para garantizar que el sistema estará interconectado en 2018, cuando el proyecto será una realidad y abastecerá de energía a Olancho, El Paraíso y Gracias a Dios. Estamos en la construcción de las cimentaciones, y todo esto apunta que estamos avanzando”, dijo Fabricio Lobo.
El trabajo es acelerado en la represa Patuca III, adonde con una longitud de 203 metros, desde el estribo izquierdo hasta el estribo derecho, se divide en 11 monolitos o pilares, los cuales están a punto de finalizar.
Se trabaja en las estructuras en las que se instalarán las cinco compuertas de 14 metros de alto por 21 metros de ancho para inyectar energía a Honduras.
Avalúos. Mientras tanto, continúa la negociación con las familias que se ubican en la zona adonde se instala el enorme plantel del proyecto. Son 45 personas con las que se negocia y se procede a efectuar los avalúos de las propiedades, los que esperan el pago de la indemnización.
“Se ha cancelado el pago de las tierras, solo se les debe a seis personas de las negociaciones anteriores. Se está haciendo el pago personalizado, pero paralelamente llevamos un trámite de la fiscalización de los últimos avalúos que abarca a 45 personas y en junio se avisará para que todas estas personas se presenten con los documentos que hacen falta para proceder con las indemnizaciones”, dijo Álvaro Ramírez.
Solo en pagos por tierras hasta la fecha, el proyecto Patuca III ha desembolsado 1,300 millones de lempiras.
Beneficios
Para pobladores de las comunidades Terrero Blanco, Las Planchas, Las Parcelas, Nueva Palestina y Juticalpa, en Olancho, el proyecto hidroeléctrico representa generación de empleos y desarrollo.
“Son unos 1,100 empleos directos que ha generado el proyecto para los hondureños y 130 a extranjeros, esto también implica los empleos indirectos, muchos han establecido pequeños negocios, y es parte de lo que nos beneficia en la comunidad. Es un efecto multiplicador”, expresó Moisés Canales, poblador de Terrero Blanco. La obra se ejecuta entre Catacamas, Juticalpa y Patuca en el río Patuca.
