22/11/2024
10:15 AM

Colón reduce la violencia y es un ejemplo a seguir en Honduras

El departamento registró solo 90 homicidios en 2016. El Codeh le recomienda al Congreso aprobar la prohibición de armas para otras regiones o ejecutar un desarme general.

    San Pedro Sula, Honduras.

    Después de cinco años de tener prohibida la portación de armas, Colón ha logrado reducir los homicidios, y de este modo se convierte en un departamento ejemplar y modelo a seguir para regiones que son más afectadas por la violencia.

    El Congreso Nacional reformó en agosto de 2012 el artículo 37 de la Ley de Control de Armas de Fuego, Municiones, Explosivos y Otros Similares (2000) con el objetivo de prohibir en Colón la “portación, en lugares públicos, transporte, en vehículos” de cualquier arma de fuego, “aunque esté registrada o exista permiso de portación”. El Legislativo tomó esa determinación en un momento que este departamento era desangrado a causa de los enfrentamientos entre carteles de la droga, delincuencia común y conflictos derivados por la tenencia de la tierra.

    Sépalo
    En 2012 hubo 7,172 homicidios en todo el país; en 2016, 5,124. En 4 años bajaron 2,048
    En 2011, el año más cruento para Honduras, en Colón murieron a balazos 307 personas, una cifra nunca antes vista. Esta cantidad se redujo luego de que entrara en vigencia la prohibición y se instalara en Tocoa la fuerza de tarea conjunta Xatruch para hacer prevalecer la ley.

    En 2016 solo murieron 90 personas por armas de fuego, según el Sistema estadístico de la Policía Nacional.

    En igual proporción descendieron el año anterior los casos de secuestro (2) y el número de personas heridas con proyectiles de diferentes calibres: hubo 8 contra 37 de 2013. El subcomisionado Juan Adolfo González Zapata, jefe de la Policía en Colón, es del criterio que la prohibición de la portación ha sido determinante para “disuadir el delito y bajar los índices de violencia”.



    Para lograr una reducción de homicidios, además de instaurar esa prohibición, Gonzáles Zapata destaca que la Secretaría de Seguridad reforzó la logística y duplicó la cantidad de elementos policiales, que han trabajado de manera integrada con la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) en todas las operaciones ejecutadas contra organizaciones criminales.

    Prohibir la portación de armas es una buena medida que puede ser replicada

    Juan Adolfo González, Jefe de Policía en Colón
    El año anterior, las autoridades policiales desarticularon más de 40 bandas delictivas y decomisaron 261 armas de fuego; entre ellas, algunos fusiles AK-47.

    “Al principio hubo mucha resistencia porque las personas de este departamento habían estado acostumbradas a portar el arma, pero ahora, cuando ven los resultados, son más conscientes y están adquiriendo el hábito de la denuncia”, manifestó.

    Para Carlos Saúl Alemán, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Tocoa (CCIToc), “la ley ha favorecido al departamento y esto mismo se puede hacer en La Ceiba, por ejemplo”

    Por ahora “solo necesitamos que no nos lleven a los guardias de los negocios por estar armados, necesitamos que los documenten y los autoricen”, dijo. Con la restricción de la portación de armas, Colón ha logrado desmarcarse de la lista de departamentos que reportan anualmente más de 100 homicidios (como Cortés, Francisco Morazán, Atlántida, Yoro, Comayagua y Santa Bárbara) y donde las familias pueden tener arsenales.



    La ley vigente, el artículo 17, indica que “las personas naturales podrán registrar un máximo de cinco (5) armas”. En otras palabras, una familia compuesta por cinco personas podría tener hasta 25.

    Desde el punto de vista del Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras (Codeh) es irracional que una persona pueda estar facultada para tener demasiadas armas.

    El Codeh le recomienda al Congreso aprobar una nueva ley y “tomar como ejemplo a Colón” para limitar el uso de armas en zonas del país que siguen tiñendo de sangre.

    “Esta ha sido siempre una de las recomendaciones que el Codeh ha hecho; el país ya no se puede estar desangrando vilmente. Debe haber un desarme general o restricción de uso en ciudades, barrios y colonias violentas”, comentó Hugo Maldonado, presidente del Codeh.

    Esa organización no gubernamental estima que de unas 20 mil víctimas de la violencia en los últimos 4 años, alrededor de 17 mil murieron tiroteadas.