La Ceiba, Honduras.
Las autoridades municipales y del Servicio Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Sanaa) tienen hasta el 30 de noviembre para gestionar el permiso ambiental para la construcción de la represa Cuyamel en la comunidad de Corinto.
La obra será financiada por el Gobierno de Japón, que ya tiene los fondos, pero no puede empezar.
El atraso está en que los habitantes de las comunidades de Sambo Creek y Corinto se oponen porque aseguran que afectará el ambiente y secará el río Cuyamel. Sin embargo, los japoneses hicieron los estudios de factibilidad y concluyeron que no dañará la naturaleza de la zona.
“Hemos venido a socializar el proyecto, el cual tendrá un alto beneficio para la población de La Ceiba. Estamos haciendo todo lo posible para que sea una realidad, sin embargo creo que hay mucha desinformación de los habitantes. No es justo que se pierda, aún y cuando ya conseguimos los fondos con Japón. Vamos a seguir socializando la obra hasta lograr los permisos necesarios”, dijo el alcalde Carlos Aguilar.
El proyecto está valorado en unos 27 millones de dólares, unos 600 millones de lempiras, y solucionaría la falta de agua potable en La Ceiba por los próximos 40 años, según los técnicos del Sanaa. Los japoneses se encargarán de la construcción y administración de los fondos. El dique se pretende construir en la parte alta del río Cuyamel. Está contemplada la edificación de una microhidroeléctrica que generará la energía necesaria para que funcione la represa.
“Estamos contra el tiempo y necesitamos aprovechar esta ayuda. Nos vamos a reunir nuevamente con los pobladores para darles a conocer a profundidad lo que se tiene contemplado hacer. Tienen que darse cuenta que no afectará el medio ambiente. Ya hemos conversado con ellos, pero todavía falta”, manifestó Denis Estrada, jefe de acueductos del Sanaa.
Reacciones
“Lo que necesitamos es más información. Los pobladores tenemos miedo que el río se seque y nos quedemos sin agua. El sitio en donde pretenden construir está a dos kilómetros de la represa que abastece de agua a la comunidad y nos preocupa”, indicó Emilio Rodríguez, presidente de la junta de agua de la aldea Corinto.
Si llegan a construir la represa, generaría decenas de empleos a los habitantes de las aldeas cercanas. La Ceiba vive una severa crisis de agua potable.
El río Danto, que abastece las tres represas que hay en la ciudad, ya no genera los volúmenes necesarios para cubrir la alta demanda y el río Cuyamel sería la solución.
Las autoridades municipales y del Servicio Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Sanaa) tienen hasta el 30 de noviembre para gestionar el permiso ambiental para la construcción de la represa Cuyamel en la comunidad de Corinto.
La obra será financiada por el Gobierno de Japón, que ya tiene los fondos, pero no puede empezar.
El atraso está en que los habitantes de las comunidades de Sambo Creek y Corinto se oponen porque aseguran que afectará el ambiente y secará el río Cuyamel. Sin embargo, los japoneses hicieron los estudios de factibilidad y concluyeron que no dañará la naturaleza de la zona.
“Hemos venido a socializar el proyecto, el cual tendrá un alto beneficio para la población de La Ceiba. Estamos haciendo todo lo posible para que sea una realidad, sin embargo creo que hay mucha desinformación de los habitantes. No es justo que se pierda, aún y cuando ya conseguimos los fondos con Japón. Vamos a seguir socializando la obra hasta lograr los permisos necesarios”, dijo el alcalde Carlos Aguilar.
El río Cuyamel, donde estará la represa.
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“Estamos contra el tiempo y necesitamos aprovechar esta ayuda. Nos vamos a reunir nuevamente con los pobladores para darles a conocer a profundidad lo que se tiene contemplado hacer. Tienen que darse cuenta que no afectará el medio ambiente. Ya hemos conversado con ellos, pero todavía falta”, manifestó Denis Estrada, jefe de acueductos del Sanaa.
Reacciones
“Lo que necesitamos es más información. Los pobladores tenemos miedo que el río se seque y nos quedemos sin agua. El sitio en donde pretenden construir está a dos kilómetros de la represa que abastece de agua a la comunidad y nos preocupa”, indicó Emilio Rodríguez, presidente de la junta de agua de la aldea Corinto.
Si llegan a construir la represa, generaría decenas de empleos a los habitantes de las aldeas cercanas. La Ceiba vive una severa crisis de agua potable.
El río Danto, que abastece las tres represas que hay en la ciudad, ya no genera los volúmenes necesarios para cubrir la alta demanda y el río Cuyamel sería la solución.