Estados Unidos
Aunque beber alcohol durante el embarazo plantea un riesgo para el niño no nacido, una de cada diez mujeres embarazadas de Estados Unidos sigue consumiendo alcohol, encuentra un estudio reciente.
Y lo que es peor, poco más del tres por ciento de las mujeres embarazadas admitieron que se dan atracones de bebida, al consumir cuatro o más bebidas alcohólicas de seguido, según un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
'Es muy desalentador. Creo que es más frecuente de lo que hubiéramos anticipado', dijo la doctora Maura Quinlan, profesora asistente de obstetricia y ginecología de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad de Northwestern, en Chicago. Quinlan no participó en el nuevo estudio.
El consumo de alcohol durante el embarazo aumenta el riesgo de pérdida del embarazo, parto prematuro y de tener un mortinato, señaló la autora líder del estudio, Cheryl Tan, epidemióloga del Centro Nacional de Defectos Congénitos y Discapacidades del Desarrollo de los CDC.
Los bebés pueden también verse afectados por un trastorno del espectro alcohólico fetal, que puede provocar discapacidades del desarrollo, conductuales y del aprendizaje, advirtió Tan.
Los trastornos del espectro alcohólico fetal son completamente prevenibles, según los CDC. Si una mujer no bebe alcohol durante el embarazo, su hijo tiene cero riesgos de un trastorno del espectro de alcoholismo fetal.
'Las mujeres embarazadas o que pudieran estar embarazadas deben saber que no hay un nivel seguro conocido de alcohol que se pueda consumir en ningún momento del embarazo', enfatizó Tan. 'Todos los tipos de alcohol deben evitase, incluyendo el vino tinto o blanco, la cerveza y el licor'.
Los datos de la encuesta continua Sistema de vigilancia de los factores de riesgo conductuales de los CDC revelaron que el 10 por ciento de las mujeres embarazadas de Estados Unidos de 18 a 44 años de edad habían consumido alcohol en los 30 días anteriores.
El estudio también reveló que las mujeres embarazadas realizan atracones de bebida con más frecuencia que las no embarazadas: unos 4.6 episodios en los 30 días anteriores, frente a 3.1 episodios.
Los atracones de bebida son preocupantes porque es muy probable que esas mujeres estén exponiendo a sus bebés al alcohol de forma regular, dijo la doctora Jennifer Wu, obstetra y ginecóloga del Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York.
'Las mujeres que se dan atracones de bebida tienden a beber con más frecuencia', señaló Wu. 'Es más probable que sigan bebiendo durante todo el embarazo'.
Entre las mujeres embarazadas, el consumo de alcohol más alto se observó en las que tenían de 35 a 44 años (el 19 por ciento), las graduadas de la universidad (el 13 por ciento) y las mujeres solteras (el 13 por ciento), hallaron los investigadores.
Hay mensajes mixtos sobre el consumo de alcohol durante el embarazo que podrían llevar a algunas mujeres a pensar que no pasa nada por beber alcohol, dijo Tan.
Por ejemplo, a algunas mujeres les dicen que beber alcohol en el tercer trimestre no tiene nada de malo, o que beber vino es saludable, o que no pasa nada con unas cantidades reducidas siempre y cuando no exageren, apuntó.
Nada de eso es verdad. 'Una vez más, no hay ni una cantidad ni un tipo de alcohol que sea seguro beber durante el embarazo', enfatizó Tan. 'Simplemente no vale la pena'.
Algunas madres embarazadas podrían estar luchando contra el alcoholismo, añadió Quinlan.
'Beber es parte de nuestra cultura, y para muchas mujeres dejar de hacerlo es más difícil, incluso cuando están embarazadas', dijo. 'La mayoría sabe que es peligroso para el embarazo, pero es una adicción como cualquier otra, y abandonarla podría ser difícil'.
Quinlan y Wu dijeron que los médicos y los expertos en salud pública deben aumentar sus esfuerzos de alcance público y educación.
'Debemos preguntar a todas las pacientes, todas las veces, en todas las visitas, y seguir enfatizando el mensaje de que el consumo de alcohol no es aceptable', dijo Quinlan.
El estudio también evaluó el consumo en las mujeres de edad fértil que no estaban embarazadas, y encontró que más o menos la mitad (el 54 por ciento) habían consumido alcohol en los 30 días anteriores. Alrededor del 18 por ciento de las mujeres no embarazadas reportan atracones de bebida.
Los resultados del estudio aparecen en la edición del 25 de septiembre de la revista de los CDC Morbidity and Mortality Weekly Report.
Aunque beber alcohol durante el embarazo plantea un riesgo para el niño no nacido, una de cada diez mujeres embarazadas de Estados Unidos sigue consumiendo alcohol, encuentra un estudio reciente.
Y lo que es peor, poco más del tres por ciento de las mujeres embarazadas admitieron que se dan atracones de bebida, al consumir cuatro o más bebidas alcohólicas de seguido, según un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
'Es muy desalentador. Creo que es más frecuente de lo que hubiéramos anticipado', dijo la doctora Maura Quinlan, profesora asistente de obstetricia y ginecología de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad de Northwestern, en Chicago. Quinlan no participó en el nuevo estudio.
El consumo de alcohol durante el embarazo aumenta el riesgo de pérdida del embarazo, parto prematuro y de tener un mortinato, señaló la autora líder del estudio, Cheryl Tan, epidemióloga del Centro Nacional de Defectos Congénitos y Discapacidades del Desarrollo de los CDC.
Los bebés pueden también verse afectados por un trastorno del espectro alcohólico fetal, que puede provocar discapacidades del desarrollo, conductuales y del aprendizaje, advirtió Tan.
Los trastornos del espectro alcohólico fetal son completamente prevenibles, según los CDC. Si una mujer no bebe alcohol durante el embarazo, su hijo tiene cero riesgos de un trastorno del espectro de alcoholismo fetal.
'Las mujeres embarazadas o que pudieran estar embarazadas deben saber que no hay un nivel seguro conocido de alcohol que se pueda consumir en ningún momento del embarazo', enfatizó Tan. 'Todos los tipos de alcohol deben evitase, incluyendo el vino tinto o blanco, la cerveza y el licor'.
Los datos de la encuesta continua Sistema de vigilancia de los factores de riesgo conductuales de los CDC revelaron que el 10 por ciento de las mujeres embarazadas de Estados Unidos de 18 a 44 años de edad habían consumido alcohol en los 30 días anteriores.
El estudio también reveló que las mujeres embarazadas realizan atracones de bebida con más frecuencia que las no embarazadas: unos 4.6 episodios en los 30 días anteriores, frente a 3.1 episodios.
Los atracones de bebida son preocupantes porque es muy probable que esas mujeres estén exponiendo a sus bebés al alcohol de forma regular, dijo la doctora Jennifer Wu, obstetra y ginecóloga del Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York.
'Las mujeres que se dan atracones de bebida tienden a beber con más frecuencia', señaló Wu. 'Es más probable que sigan bebiendo durante todo el embarazo'.
Entre las mujeres embarazadas, el consumo de alcohol más alto se observó en las que tenían de 35 a 44 años (el 19 por ciento), las graduadas de la universidad (el 13 por ciento) y las mujeres solteras (el 13 por ciento), hallaron los investigadores.
Hay mensajes mixtos sobre el consumo de alcohol durante el embarazo que podrían llevar a algunas mujeres a pensar que no pasa nada por beber alcohol, dijo Tan.
Por ejemplo, a algunas mujeres les dicen que beber alcohol en el tercer trimestre no tiene nada de malo, o que beber vino es saludable, o que no pasa nada con unas cantidades reducidas siempre y cuando no exageren, apuntó.
Nada de eso es verdad. 'Una vez más, no hay ni una cantidad ni un tipo de alcohol que sea seguro beber durante el embarazo', enfatizó Tan. 'Simplemente no vale la pena'.
Algunas madres embarazadas podrían estar luchando contra el alcoholismo, añadió Quinlan.
'Beber es parte de nuestra cultura, y para muchas mujeres dejar de hacerlo es más difícil, incluso cuando están embarazadas', dijo. 'La mayoría sabe que es peligroso para el embarazo, pero es una adicción como cualquier otra, y abandonarla podría ser difícil'.
Quinlan y Wu dijeron que los médicos y los expertos en salud pública deben aumentar sus esfuerzos de alcance público y educación.
'Debemos preguntar a todas las pacientes, todas las veces, en todas las visitas, y seguir enfatizando el mensaje de que el consumo de alcohol no es aceptable', dijo Quinlan.
El estudio también evaluó el consumo en las mujeres de edad fértil que no estaban embarazadas, y encontró que más o menos la mitad (el 54 por ciento) habían consumido alcohol en los 30 días anteriores. Alrededor del 18 por ciento de las mujeres no embarazadas reportan atracones de bebida.
Los resultados del estudio aparecen en la edición del 25 de septiembre de la revista de los CDC Morbidity and Mortality Weekly Report.