Roberto Carías, director nacional de investigación científica y astronomía, de Western International School, manifestó en entrevista a LA PRENSA que el primer paso del Sol coincide con una época muy calurosa, con alta incidencia de radiación ultravioleta, con una atmósfera cargada de humo y, por lo tanto, una alta acumulación de calor, por lo que este paso del Sol por el cenit suele ser especialmente sofocante.