Hace unas horas la actriz Ariel Winter protagonizaba un arrebato de ira en las redes social por culpa del acoso constante que asegura sufrir en su día a día a manos de los paparazzi.
Poco después anunciaba a través de la sección Stories de su perfil de Instagram su decisión de eliminar todas sus redes sociales. Y parece que la joven ha cumplido su palabra.
Por el momento la intérprete de 'Modern Family' ya ha borrado su cuenta de Twitter, a la que actualmente ya no resulta posible acceder en la plataforma. Este sería el primer paso de un proceso gradual para retirarse de la vida pública sobre el que ya se pronunció hace unos meses.
'Se trata de una industria muy dura... A ver, es un privilegio formar parte de ella y crear un contenido que adoramos y que otra gente también valora, pero no deja de ser una industria. Esa es la verdad. Te encumbra, pero también te puede destrozar igual de rápido', explicaba en aquel momento.
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Lo cierto es que la relación de Ariel con la popularidad que le reportó la popular serie de la ABC siendo tan solo una niña ha sido, como poco, complicada; y el escrutinio al que ha sido sometida su imagen o las críticas que recibe por su vestuario demasiado sexualizado en opinión de algunos no han ayudado.
De hecho, en 2017, cuando decidió probar suerte temporalmente como estudiante de derecho, los reporteros gráficos que habitualmente la siguen por las calles de Los Ángeles consiguieron aguarle con su presencia un día tan importante para ella como el inicio de su etapa universitaria.
'Buenos, los paparazzi han conseguido arruinar con éxito mi primer día de clases. Gracias', lamentaba en aquel momento vía Twitter.
Hace unas semanas Winter volvió a tener problemas con los paparazzis al publicar una fotografía de ella misma. El problema llegó cuando denunciaron su publicación por vulnerar los derechos del autor anónimo.
Por esto Instagram decidió eliminar la publicación no sin recibir una respuesta de la actriz que a modo de protesta, publicó de nuevo la imagen alegando la injusticia que se produce cuando alguien te toma una fotografía sin tu permiso pero no puedes compartirla después.