Tegucigalpa, Honduras.
El resultado de las negociaciones con la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) es que hubo avances, es decir, Honduras está más cerca de llegar a un acuerdo con el organismo internacional; pero el acuerdo en sí queda pendiente para más adelante.
Aunque la representación hondureña que participó en la negociación apuntaba por cerrar en este punto las negociaciones para la firma de la Carta de Intenciones, las partes no pudieron lograr consensos sobre temas, como la reducción del déficit fiscal del sector público, objetivo que depende en gran parte de resolver la desfavorable situación financiera de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee).
“El proceso no ha terminado, y sería incorrecto hablar de que no hay acuerdo. El cronograma sigue siendo el mismo. El Fondo Monetario ha reconocido todos los avances, simplemente están evaluando la propuesta hecha por nosotros para abordar el tema de la Enee”, dijo Marlon Tábora, presidente del Banco Central de Honduras y coordinador del Gabinete Económico.
Tipo de acuerdo
Lisandro Ábrego, cabeza de la misión del Fondo Monetario, explicó que el tipo de acuerdo al que se estaría llegando próximamente tendrá una duración de tres años y es una combinación de dos modalidades. La primera es el familiar acuerdo “stand by”; la otra es una modalidad llamada “stand by/credit facility”, con lo cual Honduras obtendría algunas facilidades de crédito adicionales y que permitiría al país obtener acceso a un apoyo presupuestario de hasta $200 millones (equivalentes a un aproximado de L4,300 millones).
“Estas negociaciones generalmente llevan tiempo y el próximo paso es que las conversaciones con los representantes del Gobierno hondureño continúan en Washington en las próximas semanas con el objetivo de llegar a un acuerdo con el FMI, según el cronograma previamente acordado”, explicó Ábrego. La misión y las autoridades hondureñas coincidieron en que para reforzar las finanzas públicas es esencial reducir el déficit de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica y de la administración central.
Asimismo, se acordó que la reducción en el nivel del gasto debe ser acompañada por cambios en su composición con el fin de crear espacios para el gasto social que ayude a reducir la pobreza, así como para proteger la inversión y promover el crecimiento económico.
Déficit fiscal
Acortar la brecha entre los ingresos y los egresos es uno de los principales retos del Gobierno hondureño para alcanzar un acuerdo con el Fondo Monetario. Las autoridades de la Secretaría de Finanzas estimaron que para 2014 el déficit de la administración central sería de 5.2% del PIB (21,413.6 millones de lempiras) y 5.6% (23,044.7 millones) para el sector público combinado.
No obstante, el FMI en la Consulta del Artículo IV 2014 considera que el déficit del Gobierno será de 5.2% del PIB durante 2014 y de 6.2% para el sector público, siendo superior al incluir las pérdidas de la Enee, las que se estima superarán los 8,000 millones de lempiras.
En junio anterior, el directorio del Fondo Monetario advirtió que “para limitar aún más el impacto negativo del sector eléctrico en el presupuesto, la reducción de pérdidas por distribución y un ajuste gradual de las tarifas siguen siendo prioridades de política”. No obstante, las acciones adoptadas por el Gobierno observan un desfase, sobre todo con la operación de los tres fideicomisos relacionados con le Enee, a lo que se agrega el aplazamiento de la entrada en vigor del nuevo pliego tarifario.
El resultado de las negociaciones con la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) es que hubo avances, es decir, Honduras está más cerca de llegar a un acuerdo con el organismo internacional; pero el acuerdo en sí queda pendiente para más adelante.
Aunque la representación hondureña que participó en la negociación apuntaba por cerrar en este punto las negociaciones para la firma de la Carta de Intenciones, las partes no pudieron lograr consensos sobre temas, como la reducción del déficit fiscal del sector público, objetivo que depende en gran parte de resolver la desfavorable situación financiera de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee).
Lea: Negociación con el FMI no adelantará resoluciones
No obstante, el Gabinete Económico considera que se avanzó lo suficiente como para llevar a las negociaciones hacia una etapa final, la que se llevaría a cabo en la ciudad de Washington, EUA, sede del organismo financiero.“El proceso no ha terminado, y sería incorrecto hablar de que no hay acuerdo. El cronograma sigue siendo el mismo. El Fondo Monetario ha reconocido todos los avances, simplemente están evaluando la propuesta hecha por nosotros para abordar el tema de la Enee”, dijo Marlon Tábora, presidente del Banco Central de Honduras y coordinador del Gabinete Económico.
Tipo de acuerdo
Lisandro Ábrego, cabeza de la misión del Fondo Monetario, explicó que el tipo de acuerdo al que se estaría llegando próximamente tendrá una duración de tres años y es una combinación de dos modalidades. La primera es el familiar acuerdo “stand by”; la otra es una modalidad llamada “stand by/credit facility”, con lo cual Honduras obtendría algunas facilidades de crédito adicionales y que permitiría al país obtener acceso a un apoyo presupuestario de hasta $200 millones (equivalentes a un aproximado de L4,300 millones).
“Estas negociaciones generalmente llevan tiempo y el próximo paso es que las conversaciones con los representantes del Gobierno hondureño continúan en Washington en las próximas semanas con el objetivo de llegar a un acuerdo con el FMI, según el cronograma previamente acordado”, explicó Ábrego. La misión y las autoridades hondureñas coincidieron en que para reforzar las finanzas públicas es esencial reducir el déficit de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica y de la administración central.
Asimismo, se acordó que la reducción en el nivel del gasto debe ser acompañada por cambios en su composición con el fin de crear espacios para el gasto social que ayude a reducir la pobreza, así como para proteger la inversión y promover el crecimiento económico.
Déficit fiscal
Acortar la brecha entre los ingresos y los egresos es uno de los principales retos del Gobierno hondureño para alcanzar un acuerdo con el Fondo Monetario. Las autoridades de la Secretaría de Finanzas estimaron que para 2014 el déficit de la administración central sería de 5.2% del PIB (21,413.6 millones de lempiras) y 5.6% (23,044.7 millones) para el sector público combinado.
No obstante, el FMI en la Consulta del Artículo IV 2014 considera que el déficit del Gobierno será de 5.2% del PIB durante 2014 y de 6.2% para el sector público, siendo superior al incluir las pérdidas de la Enee, las que se estima superarán los 8,000 millones de lempiras.
En junio anterior, el directorio del Fondo Monetario advirtió que “para limitar aún más el impacto negativo del sector eléctrico en el presupuesto, la reducción de pérdidas por distribución y un ajuste gradual de las tarifas siguen siendo prioridades de política”. No obstante, las acciones adoptadas por el Gobierno observan un desfase, sobre todo con la operación de los tres fideicomisos relacionados con le Enee, a lo que se agrega el aplazamiento de la entrada en vigor del nuevo pliego tarifario.