San Pedro Sula, Honduras
El textil parece ser el sector más importante que todavía no se termina de negociar en el tratado de libre comercio (TLC) que Honduras pretende firmar con Perú, una de las economías sudamericanas que mayor dinamismo ha demostrado en los últimos años.
“Es un tema absolutamente técnico que tiene que ver con reglas de origen relacionadas con los hilos y ese tipo de cosas”, explica Abel Cárdenas, cónsul peruano en Honduras.
El diplomático sugiere que si la parte textil pudiera terminar de negociarse pronto, aceleraría considerablemente el proceso.
Guillermo Matamoros, ejecutivo regional de la Asociación Hondureña de Maquiladores (AHM), dice que la delegación hondureña esperaba que su contraparte peruana flexibilizara algunas posturas, situación por demás normal, según el directivo.
De acuerdo con Obdulio Hernández, presidente de la Federación de Cámaras de Comercio de Honduras (Fedecámara), el tema textil representa casi el 20% de los aspectos a negociar en el TLC con el país sudamericano y su resolución aceleraría notablemente el proceso.
“Esperamos solucionarlo para que podamos avanzar rápidamente. Resuelto este problema, prácticamente nos quedaría un porcentaje mínimo para negociar”, refiere.
Lidabel Almendárez, gerente de política comercial del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), considera que “lo que tiene parado el proceso es la respuesta por parte del Gobierno peruano en cuanto a la solicitud de abrir el sector textil-confección, y obviamente tenemos otros aspectos importantes como la total eliminación de las exclusiones industriales, a lo que Honduras no puede acceder porque representa un sacrificio fiscal muy grande y no estamos preparados para esas exclusiones”, indica.
Las fuentes estiman de forma conservadora que el proceso podría concluir en junio.