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San Pedro Sula, Honduras.
Tras 30 años en Cargill y alcanzar el cargo de presidente de operaciones en Centroamérica, Bruce Burdett suspendió su retiro para emprender un proyecto con el que reafirma su cariño por Honduras.
El empresario presidió ayer la ceremonia de inauguración de la granja avícola San Carlos II, la segunda que hace Inversiones Blackbird SA (Ibsa) en los últimos doce meses.
“La industria avícola nacional puede compararse con cualquier industria avícola de cualquier parte del mundo, porque tiene eficiencia alta, pero también un nivel de bioseguridad muy alto”, dijo Burdett, presidente de Ibsa.
Entre San Carlos I y San Carlos II, cuya inversión en conjunto asciende a los $8 millones (más de L200 millones), producirán más de un millón de pollos cada siete semanas, al año 7.5 millones.
“En dos años hemos hecho dos granjas con una capacidad de 40 empleados y una proyección muy grande de
carga avícola para el mercado de Honduras”, manifestó Jenny Pineda, gerente de operaciones de Ibsa.
Cada granja cuenta con 12 galeras que miden 150 metros de largo por 16 de ancho.
Seguridad alimentaria
“Este tipo de inversiones nos alegra a todos, porque además de fortalecer la seguridad alimentaria del país elevan la industria avícola y el estatus sanitario, permitiendo además de mejorar el consumo interno, asegurar el desarrollo de productos como Pollo Norteño”, refirió Farid Kattum, gerente general de Cargill de Honduras.
A través de la marca Pollo Norteño, Cargill participa en más del 40% del mercado hondureño.
La industria presenta un crecimiento consistente entre 3.5 y 4%, lo que facilita inversiones con las
granjas avícolas San Carlos.
El consumo de carne de pollo asciende a 400 millones de libras, es decir, 48 libras por cada hondureño al año, posicionándose como la fuente de proteína más consumida por la población.
Hoy en día, la industria de huevo y pollo es robusta y abastece el mercado local, además que cuenta con un respaldo en controles sanitarios que están facilitando el ingreso a más países, como la República de China (Taiwán).
“Con esto esperamos que en los próximos años podamos exportar en cantidades muy importantes en la región y al resto del mundo”, refirió Luis Larach, presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep).
Según la Asociación Nacional de Avicultores de Honduras (Anavih), el 85% de la industria está tecnificada y el 15% restante en proceso de tecnificación.
Tras 30 años en Cargill y alcanzar el cargo de presidente de operaciones en Centroamérica, Bruce Burdett suspendió su retiro para emprender un proyecto con el que reafirma su cariño por Honduras.
El empresario presidió ayer la ceremonia de inauguración de la granja avícola San Carlos II, la segunda que hace Inversiones Blackbird SA (Ibsa) en los últimos doce meses.
“La industria avícola nacional puede compararse con cualquier industria avícola de cualquier parte del mundo, porque tiene eficiencia alta, pero también un nivel de bioseguridad muy alto”, dijo Burdett, presidente de Ibsa.
Entre San Carlos I y San Carlos II, cuya inversión en conjunto asciende a los $8 millones (más de L200 millones), producirán más de un millón de pollos cada siete semanas, al año 7.5 millones.
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" Bruce Burdett y Jenny Pineda en la celebración.
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Cada granja cuenta con 12 galeras que miden 150 metros de largo por 16 de ancho.
Seguridad alimentaria
“Este tipo de inversiones nos alegra a todos, porque además de fortalecer la seguridad alimentaria del país elevan la industria avícola y el estatus sanitario, permitiendo además de mejorar el consumo interno, asegurar el desarrollo de productos como Pollo Norteño”, refirió Farid Kattum, gerente general de Cargill de Honduras.
A través de la marca Pollo Norteño, Cargill participa en más del 40% del mercado hondureño.
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" Empresarios recorrieron las instalaciones, entre llos Farid Kattum y Luis Larach.
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El consumo de carne de pollo asciende a 400 millones de libras, es decir, 48 libras por cada hondureño al año, posicionándose como la fuente de proteína más consumida por la población.
Hoy en día, la industria de huevo y pollo es robusta y abastece el mercado local, además que cuenta con un respaldo en controles sanitarios que están facilitando el ingreso a más países, como la República de China (Taiwán).
“Con esto esperamos que en los próximos años podamos exportar en cantidades muy importantes en la región y al resto del mundo”, refirió Luis Larach, presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep).
Según la Asociación Nacional de Avicultores de Honduras (Anavih), el 85% de la industria está tecnificada y el 15% restante en proceso de tecnificación.
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