El duelo entre Vida y Motagua captó la atención de todos, estaba en juego el descenso y el boleto a las semifinales de forma directa en el cierre de las vueltas del Torneo Clausura 2024.
Cuando el partido se encontraba 1-1, vino el segundo tanto de los azules y de paso, condenar al Vida, que se jugará la permanencia en la Primera División contra los Lobos de la UPN que perdieron (1-0) ante Génesis FC.
Al minuto 72 se cumplió la famosa ‘ley del ex‘. Centro de Yeison Mejía y Román Rubilio Castillo con un cabezazo clavó el 1-2 en favor del Ciclón Azul, de paso fulminar a los cocoteros a la segunda división en ese momento, pues en Comayagua el marcador estaba 0-0 hasta que apareció el paraguayo Roberto Moreira.
El delantero hondureño, que vistió la camisa del Vida en sus inicios, lloró de inmediato. Pidió perdón a los aficionados del estadio Ceibeño. Además fue atendido por un golpe que se llevó al momento del cabezazo y fue sustituido.