El Chelsea, liderado por un magnífico Diego Costa, autor de un gol y una asistencia, asaltó este sábado el Etihad Stadium y derrotó con justicia a domicilio al Manchester City (3-1) para sumar su octava victoria consecutiva en liga y ampliar su diferencia en lo más alto de la Premier League.
Llegaban los hombres de Antonio Conte al coliseo 'Citizen' en su mejor momento de la temporada, en lo más alto de la tabla y sin perder en Premier desde el pasado 24 de septiembre.
El preparador italiano mantuvo su ya característico 3-4-3, aunque se vio forzado a introducir una modificación en el once: ingresó Cesc Fàbregas -primera titularidad desde septiembre- y se cayó del once Nemanja Matic por unas pequeñas musculares.
El resto, los mismos diez futbolistas que hace una semana se impusieron en Stamford Bridge al Tottenham por 2-1.
Por contra, Pep Guardiola revolucionó el once y apostó por un sorprendente 3-2-4-1, dando entrada a John Stones en una defensa de tres y a Ilkay Gündogan junto a Fernandinho en el centro del campo.
Jesús Navas y Leroy Sané también fueron titulares, mientras que Yaya Touré esperó su turno desde el banquillo y Raheem Sterling se cayó de la convocatoria por lesión.
A los 14 minutos llegó la primera aproximación con peligro de los visitantes, después de que Hazard aprovechara un mal despeje de la zaga para soltar un derechazo desde el balcón del área que se marchó desviado por poco.
Respondieron los hombres de Guardiola sólo cinco minutos después, cuando Agüero recogió la redonda en la frontal, se giró y lanzó un zapatazo con la zurda que envió a saque de esquina un buen posicionado Courtois.
La polémica llegó poco más tarde: primero el árbitro anuló un tanto de Fernandinho por fuera de juego -acertó el colegiado- y luego obvió una falta de David Luiz sobre el 'Kun' después de que el brasileño desequilibrara al punta argentino cuando se iba a plantar solo ante Bravo.
A falta de escasos segundos para el descanso, el City logró abrir la lata: buena jugada entre Silva y Agüero, que abrió a la derecha, donde Navas encaró a Marcos Alonso y soltó un centro que tocó en el pie derecho de Cahill y se introdujo en la meta defendida por Courtois.
Salieron en el segundo tiempo los londinenses con otra actitud y entre Diego Costa y Hazard se echaron el equipo a la espalda para intentar obrar la remontada.
Fue después de un par de ocasiones claras del City que dio su primer golpe el Chelsea. Kevin De Bruyne, negado de cara a gol este sábado, tuvo en sus botas dos goles claros, pero perdonó una y otra vez.
Primero recibió un pase entre líneas de Sané y disparó al muñeco y después mandó inexplicablemente al travesaño, con el portero vencido y la portería libre, un buen pase desde la derecha.
No perdonó el Chelsea, y Costa, en el minuto 60, en su primera ocasión clara del encuentro, subió el 1-1 al marcador del Etihad: el internacional español recibió un pase largo de Fàbregas a la espalda de Otamendi, se quitó de encima al defensor y definió al palo corto de un Bravo que hizo la estatua.
Diez minutos después, tras una oportunidad desperdiciada por Agüero, la enésima del City, se pasó del posible 2-1 al 1-2. Magnífico contragolpe de los de Conte liderado por Hazard, quien cedió a Costa y éste puso el balón entre líneas a Willian, que batió en la salida a Bravo y dejó el encuentro prácticamente visto para sentencia.
En el tiempo de descuento el Chelsea dio el golpe definitivo al City, cuando Hazard recogió un pase largo de Alonso para montar una contra excepcional, superar a Kolarov en velocidad y mandar el balón al fondo de la red para subir al luminoso el definitivo 1-3.
Perdieron los nervios los de casa, que acabaron el encuentro con nueve futbolistas después de que Agüero y Fernandinho fueran expulsados, el primero por una entrada criminal sobre David Luiz y el segundo por encararse con Fàbregas.
Con este triunfo, los hombres de Conte se llevan tres puntos de oro de Mánchester para sumar su octava victoria consecutiva en liga y ampliar su diferencia en lo más alto de la clasificación.
Por su parte, el City podría verse relegado a la cuarta plaza de la tabla si el Arsenal derrota este sábado al West Ham en el Estadio Olímpico de Londres.