San Pedro Sula, Honduras.
Mientras en Estados Unidos la Casa Blanca confirmó que desde octubre pasado se han detenido a unos 52,000 menores indocumentados, autoridades mexicanas han detectado a 9,622 niños inmigrantes no acompañados en lo que va del año, un número igual al total de 2013, lo que hace prever un cierre de 2014 con 16,000.
“Para esta fecha se han retornado 44,409 extranjeros y niños no acompañados, 9,622 en lo que va de este período. Mientras tanto, en 2013 el total de infantes fue de 9,724”, señaló Mercedes del Carmen Guillén Vicente, subsecretaria de Población, Migración y Asuntos Religiosos del Ministerio de Gobernación (Interior) de México.
Durante el foro Reforma migratoria en EUA: el rol del activismo latino y la coyuntura electoral, celebrado en el Senado mexicano, Guillén Vicente consideró que el aumento del flujo de menores no acompañados obedece a una mala lectura de un mensaje del Gobierno estadounidense sobre una posible “regularización temporal”.
Eso llevó a que los tratantes de personas hicieran creer a los padres que mediante el pago de miles de dólares pueden enviar a sus niños a que tengan mejor vida en Estados Unidos, dijo la funcionaria ante legisladores, activistas y académicos.
Añadió que una reforma migratoria en Estados Unidos es “incuestionablemente necesaria” porque persiste la urgencia de lograr medidas que contribuyan a una solución estructural y de fondo del problema de la migración infantil.
En su oportunidad, Mariana Gómez del Campo, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe del Senado, afirmó que el cruce de niños centroamericanos por México es considerado una crisis humanitaria y que su aumento ha alcanzado cantidades críticas en 2014.
Según la legisladora del conservador Partido Acción Nacional (PAN), el aumento de niños inmigrantes centroamericanos se inició en 2011 y se ha disparado en 2014, con más de 70,000 menores al año “que están expuestos y vulnerables”.
Aseguró que los senadores mexicanos han sido “incisivos” para darle “impulso y empuje” a una reforma migratoria en Estados Unidos, que representa un aspecto trascendente para los mexicanos que viven en ese país y las personas que buscan cruzar la frontera en busca de una vida mejor. El dirigente del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios en Estados Unidos, Eliseo Medina, hizo un llamado al presidente mexicano Enrique Peña Nieto y al Congreso para que comunique al Gobierno estadounidense la urgencia de una reforma migratoria integral.
Condiciones horribles
Jeh Johnson, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, visitó ayer una instalación de procesamiento migratorio en Nogales, Arizona, en la frontera con México. El funcionario estadounidense señaló que la masiva inmigración de niños son acompañantes, en su mayoría de Honduras, El Salvador y Guatemala, es propiciada por las malas condiciones de sus países de origen.
“Las condiciones en Honduras son horribles”, dijo el jefe de Seguridad Interna al referirse a los altos índices de violencia en el país, pero aclaró que nada justifica que “un niño haga un viaje tan peligroso”.
Johnson aseguró hoy que los menores inmigrantes procedentes de Centroamérica, alojados en Nogales (Arizona) por la Patrulla Fronteriza, “no están en una situación ideal, pero están bien cuidados en estas circunstancias”.
Johnson visitó ayer el centro de procesamiento de extranjeros de la Patrulla Fronteriza en Nogales, donde se alojan 900 menores inmigrantes, en un recorrido acompañado por la gobernadora de Arizona, Jan Brewer, y el alcalde de la ciudad, Arturo Garino.
En una conferencia de prensa en español fuera de la estación, Johnson explicó: “Los padres deben considerar el envío de estos niños desde Centroamérica. El recorrido es muy peligroso y no hay una vía libre, no hay permisos para sus hijos que vienen a Estados Unidos”.
El número de niños migrantes hallados solos en la frontera entre México y Estados Unidos casi se ha duplicado ya en lo que va del año fiscal 2014; suman 57,000.
Esta cifra supera por mucho a las 24,493 de 2013, aunque aún quedan cuatro meses para acabar el año fiscal 2014, advirtió el estudio. La gran mayoría fueron hallados por las autoridades fronterizas de EUA en el sector de Río Grande, en el sur de Texas. Cerca del 71% del total (33,470 menores) se reportó en esta zona, lo que significa un incremento de más del 160% respecto a 2013.
Como segundo sector de entrada figura Tucson, Arizona, donde el total fue de 6,254 en lo que va de año, casi el mismo que en todo 2013, y son 6,569.
Por nacionalidades, aunque México sigue siendo la principal de los recién llegados, se ha detectado un incremento de los menores procedentes de Centroamérica, que suponen ya tres cuartas partes del total.
Desde 2009, el número de menores indocumentados que viajaban solos procedentes de Guatemala ha crecido 930%; de El Salvador, 700 %, y desde Honduras, 1,200%.
La agenda de Honduras
La comisión de Honduras encabezada por la primera dama Ana García de Hernández, tuvo anoche una reunión de trabajo con la delegación oficial en Estados Unidos conformada por Jorge Alberto Milla Reyes, embajador en ese país; Ana Bulnes, cónsul de Honduras en McAllen, Texas; Karol Escalante, primera secretaria de la Embajada de Honduras; además de los miembros de la comitiva que viajaron con la señora de Hernández.
Ella busca conocer in situ más sobre la situación de unos 13,000 menores hondureños detenidos en albergues de ese país y darles asistencia, informó una fuente oficial. García y la comitiva hondureña viajaron ayer a McAllen, en el estado de Texas (sur), para conocer la situación de los niños hondureños que están bajo la custodia de la Patrulla Fronteriza estadounidense.
La delegación oficial también es integrada por las subsecretarias de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional, Diana Valladares; de Derechos Humanos, Justicia, Gobernación y Descentralización, Karla Cueva; y la directora de Infancia, Adolescencia y Familia, Lolis Salas. Asimismo viajan la fiscal de la Niñez, Nora Urbina, y personal de la Embajada de Honduras en Washington.
La esposa del presidente hondureño Juan Orlando Hernández tendrá hoy un encuentro con el alcalde de McAllen, Jim Darling, y luego visitará las estaciones de la Patrulla Fronteriza en el valle de Río Grande, Weslaco, Harlingen y Fort Brown en Brownsville, donde se encuentran los menores.
La delegación visitará el próximo viernes las cabañas de inspección en Falfurrias y Sarita y hará un recorrido por el desierto.
El sábado acudirá a las instalaciones de la Patrulla Fronteriza de McAllen y visitará la base de la Fuerza Aérea Lackland, en San Antonio, Texas.
García y su comitiva tienen previsto regresar el sábado próximo a Tegucigalpa, apuntó la nota oficial.
Mientras en Estados Unidos la Casa Blanca confirmó que desde octubre pasado se han detenido a unos 52,000 menores indocumentados, autoridades mexicanas han detectado a 9,622 niños inmigrantes no acompañados en lo que va del año, un número igual al total de 2013, lo que hace prever un cierre de 2014 con 16,000.
“Para esta fecha se han retornado 44,409 extranjeros y niños no acompañados, 9,622 en lo que va de este período. Mientras tanto, en 2013 el total de infantes fue de 9,724”, señaló Mercedes del Carmen Guillén Vicente, subsecretaria de Población, Migración y Asuntos Religiosos del Ministerio de Gobernación (Interior) de México.
Durante el foro Reforma migratoria en EUA: el rol del activismo latino y la coyuntura electoral, celebrado en el Senado mexicano, Guillén Vicente consideró que el aumento del flujo de menores no acompañados obedece a una mala lectura de un mensaje del Gobierno estadounidense sobre una posible “regularización temporal”.
Eso llevó a que los tratantes de personas hicieran creer a los padres que mediante el pago de miles de dólares pueden enviar a sus niños a que tengan mejor vida en Estados Unidos, dijo la funcionaria ante legisladores, activistas y académicos.
Añadió que una reforma migratoria en Estados Unidos es “incuestionablemente necesaria” porque persiste la urgencia de lograr medidas que contribuyan a una solución estructural y de fondo del problema de la migración infantil.
En su oportunidad, Mariana Gómez del Campo, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores para América Latina y el Caribe del Senado, afirmó que el cruce de niños centroamericanos por México es considerado una crisis humanitaria y que su aumento ha alcanzado cantidades críticas en 2014.
Según la legisladora del conservador Partido Acción Nacional (PAN), el aumento de niños inmigrantes centroamericanos se inició en 2011 y se ha disparado en 2014, con más de 70,000 menores al año “que están expuestos y vulnerables”.
Aseguró que los senadores mexicanos han sido “incisivos” para darle “impulso y empuje” a una reforma migratoria en Estados Unidos, que representa un aspecto trascendente para los mexicanos que viven en ese país y las personas que buscan cruzar la frontera en busca de una vida mejor. El dirigente del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios en Estados Unidos, Eliseo Medina, hizo un llamado al presidente mexicano Enrique Peña Nieto y al Congreso para que comunique al Gobierno estadounidense la urgencia de una reforma migratoria integral.
Condiciones horribles
Jeh Johnson, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, visitó ayer una instalación de procesamiento migratorio en Nogales, Arizona, en la frontera con México. El funcionario estadounidense señaló que la masiva inmigración de niños son acompañantes, en su mayoría de Honduras, El Salvador y Guatemala, es propiciada por las malas condiciones de sus países de origen.
“Las condiciones en Honduras son horribles”, dijo el jefe de Seguridad Interna al referirse a los altos índices de violencia en el país, pero aclaró que nada justifica que “un niño haga un viaje tan peligroso”.
Johnson aseguró hoy que los menores inmigrantes procedentes de Centroamérica, alojados en Nogales (Arizona) por la Patrulla Fronteriza, “no están en una situación ideal, pero están bien cuidados en estas circunstancias”.
Johnson visitó ayer el centro de procesamiento de extranjeros de la Patrulla Fronteriza en Nogales, donde se alojan 900 menores inmigrantes, en un recorrido acompañado por la gobernadora de Arizona, Jan Brewer, y el alcalde de la ciudad, Arturo Garino.
En una conferencia de prensa en español fuera de la estación, Johnson explicó: “Los padres deben considerar el envío de estos niños desde Centroamérica. El recorrido es muy peligroso y no hay una vía libre, no hay permisos para sus hijos que vienen a Estados Unidos”.
El número de niños migrantes hallados solos en la frontera entre México y Estados Unidos casi se ha duplicado ya en lo que va del año fiscal 2014; suman 57,000.
Esta cifra supera por mucho a las 24,493 de 2013, aunque aún quedan cuatro meses para acabar el año fiscal 2014, advirtió el estudio. La gran mayoría fueron hallados por las autoridades fronterizas de EUA en el sector de Río Grande, en el sur de Texas. Cerca del 71% del total (33,470 menores) se reportó en esta zona, lo que significa un incremento de más del 160% respecto a 2013.
Como segundo sector de entrada figura Tucson, Arizona, donde el total fue de 6,254 en lo que va de año, casi el mismo que en todo 2013, y son 6,569.
Por nacionalidades, aunque México sigue siendo la principal de los recién llegados, se ha detectado un incremento de los menores procedentes de Centroamérica, que suponen ya tres cuartas partes del total.
Desde 2009, el número de menores indocumentados que viajaban solos procedentes de Guatemala ha crecido 930%; de El Salvador, 700 %, y desde Honduras, 1,200%.
La agenda de Honduras
La comisión de Honduras encabezada por la primera dama Ana García de Hernández, tuvo anoche una reunión de trabajo con la delegación oficial en Estados Unidos conformada por Jorge Alberto Milla Reyes, embajador en ese país; Ana Bulnes, cónsul de Honduras en McAllen, Texas; Karol Escalante, primera secretaria de la Embajada de Honduras; además de los miembros de la comitiva que viajaron con la señora de Hernández.
Ella busca conocer in situ más sobre la situación de unos 13,000 menores hondureños detenidos en albergues de ese país y darles asistencia, informó una fuente oficial. García y la comitiva hondureña viajaron ayer a McAllen, en el estado de Texas (sur), para conocer la situación de los niños hondureños que están bajo la custodia de la Patrulla Fronteriza estadounidense.
La delegación oficial también es integrada por las subsecretarias de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional, Diana Valladares; de Derechos Humanos, Justicia, Gobernación y Descentralización, Karla Cueva; y la directora de Infancia, Adolescencia y Familia, Lolis Salas. Asimismo viajan la fiscal de la Niñez, Nora Urbina, y personal de la Embajada de Honduras en Washington.
La esposa del presidente hondureño Juan Orlando Hernández tendrá hoy un encuentro con el alcalde de McAllen, Jim Darling, y luego visitará las estaciones de la Patrulla Fronteriza en el valle de Río Grande, Weslaco, Harlingen y Fort Brown en Brownsville, donde se encuentran los menores.
La delegación visitará el próximo viernes las cabañas de inspección en Falfurrias y Sarita y hará un recorrido por el desierto.
El sábado acudirá a las instalaciones de la Patrulla Fronteriza de McAllen y visitará la base de la Fuerza Aérea Lackland, en San Antonio, Texas.
García y su comitiva tienen previsto regresar el sábado próximo a Tegucigalpa, apuntó la nota oficial.