SAN PEDRO SULA. Desde los años cincuenta, la moda Adlib o más conocida como ibicenca, es una propuesta en color blanco donde el trabajo de los bordados, encajes, ganchillo y el algodón convergen en atuendos frescos y cómodos para los días de calor y playa.
La exótica isla española de Ibiza ha inspirado esta tendencia siempre y ahora que se ha celebrado la 46 edición de la pasarela Adlib, el espíritu de esta moda sigue más vigente que nunca.
“Es una conceptualización de diseño que mezcla lo boho, con la pureza del color, delicadeza y frescura. El algodón, los linos y telas ultra frescas con tejidos más decorativos como el encaje, el guipur y hasta el chantillí se fusionan en vestidos cortos o largos y blusas. Todo es suelto. Ninguna de las propuestas va entallada al cuerpo”, describe la diseñadora Giselle Matamala.
Para lucirla. El clásico vestido blanco cobra distinción con detalles ricos en textura y confección. Las prendas básicas son largas, con vuelos o tiempos anchos, el clásico patronaje recto o con franjas decorativas de encaje.
Es una propuesta ideal para los días de calor. “Se puede usar por el día. No sofoca porque son texturas y telas que provocan relajación. Hay blusas con las que se puede combinar con un short o un pantalón de mezclilla o jeans grueso. Si se le quiere dar vida al conjunto, nada mejor que optar por accesorios con color y un básico es el turqueza que lo hace destacar aún más al tono blanco”, aconseja la experta en moda de tiendas Carrión Sindy Posas.
Esta propuesta es un rediseño inspirado en las enaguas que llevaban las mujeres ibicencas por debajo de sus tradicionales vestidos con la moda hippy que comenzaba a llegar a la isla de Ibiza por aquella época.
En este rincón de playa y calor, en cada esquina hay una boutique que ofrece moda ibicenca. Es el vestir de rigor si se visita Ibiza en vacaciones o días de sol y mar.
Liberación. Con una prenda ibicenca o adlib, la mujer se siente libre, ya que el ADN de la propuesta es la libertad. “En Honduras se suele vestir atuendos así solo en Semana Santa, pero por el clima caluroso actualmente, no hay excusa para lucirlos”, aconseja el diseñador Walder Cruz.
Entre los cuidados que se debe tener en cada prenda está lavarse a mano, con detergente líquido, agua fría y sin cloro, “ya que puede desgastar los tejidos o el impecable tono blanco se puede manchar o pierde lo impecable”, comenta.
La exótica isla española de Ibiza ha inspirado esta tendencia siempre y ahora que se ha celebrado la 46 edición de la pasarela Adlib, el espíritu de esta moda sigue más vigente que nunca.
“Es una conceptualización de diseño que mezcla lo boho, con la pureza del color, delicadeza y frescura. El algodón, los linos y telas ultra frescas con tejidos más decorativos como el encaje, el guipur y hasta el chantillí se fusionan en vestidos cortos o largos y blusas. Todo es suelto. Ninguna de las propuestas va entallada al cuerpo”, describe la diseñadora Giselle Matamala.
Para lucirla. El clásico vestido blanco cobra distinción con detalles ricos en textura y confección. Las prendas básicas son largas, con vuelos o tiempos anchos, el clásico patronaje recto o con franjas decorativas de encaje.
| Es una moda que no sofoca por el tipo de texturas.
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Es una propuesta ideal para los días de calor. “Se puede usar por el día. No sofoca porque son texturas y telas que provocan relajación. Hay blusas con las que se puede combinar con un short o un pantalón de mezclilla o jeans grueso. Si se le quiere dar vida al conjunto, nada mejor que optar por accesorios con color y un básico es el turqueza que lo hace destacar aún más al tono blanco”, aconseja la experta en moda de tiendas Carrión Sindy Posas.
Esta propuesta es un rediseño inspirado en las enaguas que llevaban las mujeres ibicencas por debajo de sus tradicionales vestidos con la moda hippy que comenzaba a llegar a la isla de Ibiza por aquella época.
En este rincón de playa y calor, en cada esquina hay una boutique que ofrece moda ibicenca. Es el vestir de rigor si se visita Ibiza en vacaciones o días de sol y mar.
Liberación. Con una prenda ibicenca o adlib, la mujer se siente libre, ya que el ADN de la propuesta es la libertad. “En Honduras se suele vestir atuendos así solo en Semana Santa, pero por el clima caluroso actualmente, no hay excusa para lucirlos”, aconseja el diseñador Walder Cruz.
Entre los cuidados que se debe tener en cada prenda está lavarse a mano, con detergente líquido, agua fría y sin cloro, “ya que puede desgastar los tejidos o el impecable tono blanco se puede manchar o pierde lo impecable”, comenta.
