La comunidad de Lamlaya, en Puerto Cabezas, Nicaragua, se vio sacudida por un acto de violencia sin precedentes.
Licar Michell Bonaparte, un joven hondureño de 30 años de edad y residente en Nicaragua, desencadenó una serie de eventos que culminaron en la pérdida de una vida y dejaron a otra pendiendo de un hilo.
En medio de las primeras horas de la madrugada, Bonaparte regresó a su hogar en un estado de ebriedad alarmante.
Dentro de la vivienda, se encontraba su cuñada, Johsy Panting López, con quien sostuvo una acalorada discusión que rápidamente escaló hacia la violencia.
Armado con un machete, Bonaparte atacó a Johsy Panting López, infligiendo heridas que acabaron con su vida.
En un intento por detener la brutalidad, la esposa de Bonaparte, Araceli Panting López, de 29 años, intervino, pero también resultó gravemente herida en el proceso.
Tras el violento ataque, Bonaparte huyó de la escena y se refugió en la casa de su tía, a quien tomó como rehén y amenazó para evitar ser entregado a las autoridades.
Los vecinos de la comunidad, conmocionados por lo sucedido, intentaron intervenir, pero fueron las fuerzas policiales las que finalmente lograron capturar al agresor.
Actualmente, Aracely Panting se encuentra hospitalizada en el Hospital Nueva Amanecer de Puerto Cabezas, con un pronóstico reservado.
